La galería Ceferino Navarro acoge hasta el 28 de abril la colectiva ‘La memoria trascendental’
El titular de la sala informa que llevaba años con la idea de hacer una exposición sobre la nueva figuración, «cuyo origen puede estar en otra anterior titulada ‘El nuevo realismo’, que se hizo hace cuatro o cinco años. Hemos pretendido englobar 13 de los autores jóvenes con más proyección dentro de la nueva figuración». En concreto, cada uno expone dos obras, una de formato grande, 100×100 cm o 100×130 cm, y otra pequeño. De ellos doce son pintores de Granada y de otros puntos de España y un escultor que tienen en común su juventud, pues «la mayoría tiene unos treinta y tantos años y les une la forma de concebir la figuración», lo que les hace que a partir de conocer la academia ellos se alejan de la misma manteniéndose en la pintura figurativa no llegando al conceptualismo ni a la abstracción. En cuanto a la temática indica que es la tradicional de esta manifestación aunque varía la forma de plasmarla es donde se diferencia en composición, línea, y, sobre todo, «en lo que es la forma de analizar la pintura en sí. La temática es simplemente un pretexto», indica frente a los cuadros que reflejan paisajes urbanos, estampas rurales, retratos o bodegones.
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Entre los asistentes al acto inaugural estaba la malagueña Annika Llavero (1985) quien reconocía la suerte de poder dedicarse exclusivamente a la pintura. Cuenta en su haber con algunos premios y trabaja también en otros países como Reino Unido. En la sala muestra tres piezas de pequeño formato que forman parte de naturalezas muertas, pintadas al natural, que «aunque son sencillas en composición y gamas cromáticas buscan algo más transcendental y profundo. Lo que nos une puede ser la belleza, los miedos o las aficiones, a partir de objetos comunes y reconocibles. La realidad es una buena herramienta para conectar con el público». Por su parte, el granadino Jesús Montoya (1987), ya doctor en Bellas Artes, muestra dos de sus originales escultura y precisa que «son dos obras inéditas de reciente creación pertenecientes a una serie en la que estoy trabajando llamada ‘Sentar la cabeza’, motivo por el que aparece esta parte del cuerpo con figuras encima».
Otro de los artistas plásticos asistentes fue Javier Martín Aranda (1983), natural de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real), que participa con un par de obras que tienen el nexo común de tratarse de «paisajes íntimos, desnudos y atmosféricos» de reciente creación. Para él estar es en esta muestra granadina «es un lujo y un halago que me haya incluido pues hay un nivel descomunal». También tuvimos la oportunidad de conocer a Leonor Solans (Sevilla, 1980), licenciada en Bellas Artes quien en expone uno de sus originales retratos de niñas y a Eugenio Ocaña (Granada, 1978) del que llama la atención su ‘Ramo de rosas’, un óleo sobre tela de 120 centímetros de diámetro.
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