Juan José Gallego Tribaldos: «Castillos de España»
Viejos castillos de España,
nacidos en la Edad Media,
velan mudos y nostálgicos
sus sueños de amor y guerra.
Viejos castillos roqueros,
reliquias de nuestra esencia,
embriagados por aromas
de juncia y de madreselva
y de lirios compungidos
en las tardes cenicientas.
Viejos castillos de España
de arrogancia quijotesca,
de batallas y torneos,
de Tizonas y Babiecas,
de perdones y destierros,
de heroísmos y de afrentas,
de dulzainas y clarines,
de timbales y trompetas,
de la ley de las espadas,
de cautivos y cadenas
en los versos luminosos
de los Cantares de Gesta.
Viejos castillos roqueros
de laúdes y vihuelas,
de obispos y barraganas,
de romances y leyendas,
de hijosdalgo y caballeros,
de horca, látigo y espuelas,
de donceles embaucados
por pícaras alcahuetas,
de rogativas y rezos,
de frailes y de abadesas,
de lujuriosas señoras
y virginales doncellas.
Viejos castillos de España
anclados en nuestra tierra,
hoy, ancianos venerables,
ayer, sedientos de guerras,
siempre, refugio de vientos
que por sus torres y almenas
truecan las picas en silbos
y en quietud las turbulencias.
Maravilloso.
Gracias, amigo
Gracias Juan José.
La vida en los castillos de España nos la presentas, en tu romance, como una película, descrita con palabras certeras como saetas, lanzadas al viento en esta mañana fría y azul.
Un abrazo.
Como siempre, acertado y precioso romance de nuestros castillos, insignia de una época.
Los castillos en España forman parte del paisaje y de la Historia. Ahí están, mudos pero con muchos relatos adormecidos entre sus ruinas. Un abrazo.
Amigo Juan, la imagen de los castillos aupados en las colinas es uno de los rasgos distintivos de España. Ejercen un poder de atracción que te llevan a la evocación y el entusiasmo por la Historia de España. Un abrazo.
Magníafico. Asombra comprobar tanta facilidad y acierto.
Gracias, Juan. Ya sabes, el octosílabo está en la masa de nuestras arterias. Un abrazo