Paralelamente prepararon algunos platos típicos como tortilla de patatas, pan con aceite y tomate o azúcar, atún con morrones, jamón serrano, aceitunas, chorizo…»y una sangría, por supuesto sin alcohol», aclara Concha. Algunos niños y niñas aprendieron a bailar la reja, otros colorearon banderas, el mapa, trajes típicos, etc.
La reja
La parte más festiva se viviría por la tarde con la participación de las familias y la demostración de todo lo preparado en la sesión matinal. El resultado fue muy satisfactorio a juzgar por la opinión de J. Cole una de las madres. «Mi hija de 8 años disfrutó intensamente de esta jornada. Pudo vestirse con su traje de gitana y bailar una tradicional danza andaluza. Rachel temía que la danza fuera difícil pero cuando la señora Cabello les enseñó cómo hacerlo les resultó muy fácil. Ella disfrutó mucho bailando para las familias. También preparando algunos platos típicos y descubrió que le encanta el chorizo con tomate. El profesorado y los escolares trabajaron duro e hicieron que la fiesta fuera un gran éxito», concluye esta madre.
Antes de dar por concluida esta celebración escucharon el himno andaluz. Sin lugar a dudas una experiencia muy positiva para todos los participantes.