A lo largo del curso, los alumnos y alumnas crean y gestiona una asociación con la finalidad de conseguir fondos para financiar algún proyecto de interés social desarrollado por alguna de las ONGs participantes (Cruz Roja, Entre Culturas, Amigos del Sáhara, Amnistía internacional, Unicef, Asociación pro derechos Humanos de Andalucia, Madre Coraje entre otras).
El acto final ha consistido en la exposición de 36 puestos en una calle céntrica de Granada donde han vendido los productos creados para las ONGs con las que han colaborado y una entrega de diplomas por parte de Ana Gámez, delegada de Educación a todos los centros participantes.
Javier Alonso es el dinamizador de este programa que aúna los esfuerzos y la energía de todos los participantes. Raimundo Fornieles, director del IES Hermenegildo Lanz, nos dice que su centro ha aportado 30 alumnos de Carrocería, otros 30 de 4º de la ESO y 60 del Plan de Cualificación Profesional (PCPI). Han colaborado con Unicef y «ha supuesto una gran motivación para el alumnado, haciendo que se sientan capaces de ponerse de acuerdo, de emprender y de vender todo lo que ellos mismos han fabricado» comenta el director y «son solidarios porque es la ONG la que se lleva el beneficio de las ventas y esta actividad les abre los ojos a una realidad que es el tercer mundo» continúa diciendo Fornieles.
El IES Aynadamar fue otro de los centros que pusieron su granito de arena, Antonio Molina, el profesor coordinador del grupo, nos contó que «sus alumnas han creado y gestionando una asociación con la finalidad de realizar una labor de concienciación en el centro educativo, y de obtención de fondos para financiar proyectos de interés social desarrollados por la O.N.G. ‘Entreculturas’. ‘Peluquerías sin fronteras’ fue el nombre que el alumnado de Aynadamar eligió para su asociación. Este proyecto se enmarca dentro del programa Jóvenes Emprendedores Solidarios, puesto en marcha por la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía.
Creación
«Utilizando como hilo conductor la creación y gestión de la asociación, el alumnado ha adquirido cualidades y actitudes emprendedoras como la observación del entorno, la planificación, el trabajo en equipo, iniciativa, creatividad, autoestima, habilidades de comunicación, responsabilidad e independencia», sigue diciendo el profesor Molina, que añade: «La participación en esta III Feria Solidaria de Jóvenes Emprendedores Solidarios ha sido una oportunidad más para concienciar al alumnado de que la solidaridad, ese impulso que nos mueve a los seres humanos a ayudarnos unos a otros, es uno de los pilares de la educación».
Vimos también un puesto de un grupo del Instituto Alhambra acompañados por su profesor Federico Viana, los alumnos ofrecían a los viandantes, entre otros objetos, preciosas libretas de papel reciclado al módico precio de un euro. En la entrega de diplomas que tuvo lugar en el teatro Isabel la Católica, Ana Gámez destacó que los alumnos participantes le habían contado que con este programa habían aprendido lo que es la solidaridad y a ser solidarios, a respetar el medio ambiente, a escuchar a los demás… Recalcó que sin el trabajo del alumnado y el del profesorado, los programas de la Consejería dejan de tener su pleno sentido.