Es evidente de que este autor quiere atrapar al lector incluso antes de empezar a leer su libro. No en vano ha diseñado juegos como “Bomberos en Acción”, Hexaedros que se ha convertido en el juego oficial del Parque de las Ciencias y libros como “El Secreto Nazarí: La leyenda” (2010), cuyo relato forma parte de la trilogía mixta del juego ‘Las Torres de la Alhambra’, y “Las Torres de la Alhambra: La realidad» (2012), de venta en exclusiva para el mundo entero en las librerías del Patronato de la Alhambra y Generalife. Ahora, el libro que presentará en primicia el miércoles lleva en la contraportada la petición de tres compromisos y una frase, a modo de eslogan con la que pretende hacer cómplices y animar a los posibles lectores: “El Enigma del Gran Maestro. Un reto inteligente para lectores que deseen conocer la mayor intriga histórica secreta jamás contada”.
En cuanto al triple “pacto de honor” para que este “nuevo género literario” mantenga su interés y produzca el lógico disfrute exige que no se “hojee ni ojee el libro” sino que se lea de principio a final, que no se anticipe al final ni visualice previamente las fotos y dibujos y, por último, “y casi más importante por el bien de los demás, abstenerse de comentarle a nadie el nombre de ninguno de los 40 personajes famosos protagonistas de esta trascendental historia”, pues quien quiera saberlo “que lea”.
Consecuentemente con este pacto, sólo podemos contarle algunos detalles que sin lugar a dudas pueden ser curiosos. La narración comienza con una descripción detallada del golpe de estado del 23-F en tanto que se inicia la intriga en el vecino Museo del Prado. Los cuarenta personajes históricos aparecen sin nombre puesto que forman parte de la intriga al tener que ser descubiertos por los propios lectores. Aunque se inicia en un presente más o menos cercano continua con un salto en el tiempo hacia atrás hasta el siglo XVI en el que “el gran maestro” entrega “el enigma” que tendrá que custodiarlo a lo largo de los tiempos hasta el siglo XXI por un erudito del conocimiento, del arte o la ciencia. De ahí el subtítulo de “eruditos y custodios”.
Personajes ocultos
A lo largo de los dos últimos años este autor ha trabajado en la documentación y redacción de esta singular obra que finalmente ha decidido firmar con el seudónimo de Fran Duver a modo de homenaje a dos de sus escritores favoritos en su infancia y juventud: Alejandro DUmas y Julio VERne. “El segundo motivo es porque hasta ahora he editado mis novelas como Paco López Martín, y considero que aunque sea mi nombre, también es cierto que hay muchos Paco López en este país”, aclara este autor que se muestra muy satisfecho con el trabajo final hasta el punto y con la doble presentación de esta semana, pues como advierte que “quien asista será testigo del nacimiento de una nueva técnica narrativa” pues no en vano considera que ha concebido “una estructura diferente a cualquier novela que se haya escrito anteriormente. E incluso creo que he inventado una nueva técnica literaria, la cual he bautizado con el nombre de “protagonistas ocultos”. Personajes históricos sin nombre con los que los lectores, además, recorrerán importantes ciudades europeas de Alemania, Austria, España, Francia, Gran Bretaña, Italia, Países Bajos, Rusia, Suiza, entre otras
|
Información relacionada:
– IDEAL EN CLASE: Un juego de estrategia nazarí y dos «novelas historiadas» con la Alhambra como protagonista