“Hacer este libro se ha convertido en mi refugio” nos confiesa esta poeta nacida en Cogollos Vega donde estudió durante su etapa de Bachiller para posteriormente realizar estudios de Filología Hispánica. Estos escasos datos biográficos nos los facilita ante nuestra existencia pues prefiere que se valore exclusivamente el contenido del propio libro. También nos indica que desde pequeña vive alimentando sueños, creyendo que son posibles, luchando por ellos, y que se encontró con la poesía por el impacto de los ojos de su madre, una mujer con una expresión triste en su mirada pero de una sonrisa maravillosa. Otros recuerdos de su infancia son el olor a chimenea, la caricia de abuela, los árboles, las montañas y la Cueva del Tajo donde soñaba con la vida al tiempo que veía salir el humo por las chimeneas, los ratos en la era con un papel en el que escribir…
Ahora, editado por la Asociación Cultural Arte Fénix que preside, ha cumplido otro sueño al realizar esta publicación totalmente artesana y de la que ha realizado la corta tirada de 150 ejemplares. Para ello ha inaugurado la colección de poesía Zíngara, y los ingresos que se obtengan de su venta, una vez cubiertos los gastos, serán para destinarlo a conseguir los fines de la Asociación que no son otros que colaborar en actos benéficos, recuperar escritores y promover a otros autores, entre otros. “La idea de hacer los libros de forma artesana persigue convertirlo en algo más intimo, intentar que la intención y el amor se englobe en la forma de cofre donde se esconde un regalo que es lo que quiero dar a mis lectores”, nos explica respecto al formato en tanto que del contenido resalta que “suelo buscar el revés de las cosas, una pena, un desgarro, al que le da la vuelta para buscar lo positivo, no sé si lo consigo pero es lo que pretendo”. También que hace mucho hincapié en la naturaleza de las cosas y de nosotros mismos, por eso lleva un anexo de poemas dedicado a las Tablas de Daimiel, como una manera de sellar esa fuerza con la naturaleza con cuyo movimiento de recuperación se sumó.
Con anterioridad Mara Romero había escrito la novela ‘Los lagos del cielo’, publicada por la editorial canadiense Trafford en 2007 que se está planteando reeditar en la actualidad. También en 2010 publicó ‘Cuentos de Aceituna’ (Bubok) inspirados durante la guerra de Irak pues le impactaron los ojos de los niños asustados por las bombas. Poemas que escribió y se quedaron guardados en un cajón hasta que se encontró con María Braga que recoge niños de la calle en Brasil a la que solicitó dibujos de sus sueños de estos niños que se reproducen como fondo de sus poemas. Igualmente su finalidad es benéfica pues los ingresos de su venta se destinan a la Asociación Bautista Shalom Adonay de Brasil, concretamente para la construcción de un Hogar para niños de la calle que lleva por nombre “Corazones con esperanza”.
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