«Llegó a mis manos hace 23 años, a través de un amigo quien lo importó de Inglaterra. En un momento dado decidió venderlo y tuve la suerte de estar por allí», explica este empresario que junto con su hijo Joan compatibilizan su afición que «no capricho» por los coches con su faceta de viticultores y elaboradores de vinos salidos de su joven bodega, Paraje del Mincal y Diez días de Marzo. Aprovechamos para contemplar tanto el exterior como el interior del vehículo y agradecemos un pequeño paseo durante el cual Lluis nos va explicando sus características. «Se trata de un Jaguar MK 2, modelo 2,4 Litre, del año 60, con un motor 1.400, 6 cilindros en línea con doble árbol de levas y dos carburadores dobles. Tiene un motor fuerte y compacto que nunca me ha dado ningún problema», nos resume.
A ello añade que lo mantienen tal y como se fabricó, en toda su estructura, «es un coche que en la historia del automóvil se considera una de las líneas más elegantes y armoniosas. En este coche, lo mires por donde lo mires, todo es armonía», palabras que nos hacen pensar en un eslogan muy apropiado. Cuando llegamos a la puerta de la ermita de San Sebastián, situada junto a la casa consistorial de Caniles, continuamos observando la belleza de su cromado y las singulares ruedas con radios, como elementos más llamativos de su exterior. Al respecto Lluis indica que «todo está perfectamente integrado, con líneas redondeadas, pintura original color blanco hueso que es el color más tradicional de este modelo», lo que ha hecho que más de una ocasión le hayan pedido para trasladar a alguna novia en el día de su boda.
Respecto al origen de su afición señala que le viene de pequeño y su pasión por estos vehículos le llevó a integrarse en el Club Automóvil Clásico del Altiplano del que forma parte desde su puesta en marcha pues lo considera «un club con mucha iniciativa y gente joven y siempre que podemos participamos con ellos en las salidas y concentraciones». Al tiempo que nos muestra el motor señala que tal vez el único inconveniente sea el consumo, «ya que gasta bastante, entre 13 y 14 litros a los cien kilómetros, al tratarse de motores grandes y ser un coche muy pesado». A pesar de ello señala que «lo tenemos para usarlo, es muy cómodo en carretera y viajamos bastante. Nos encanta viajar con él por toda España, Sur de Francia e Islas Baleares». A continuación nos llama la atención sobre la «famosa» parrilla frontal y los cuatro faros delanteros.
También el interior se mantiene en perfecto estado en este coche que ya ha superado el medio siglo, del que llama poderosamente la atención el salpicadero o tablier de madera con diversos relojes «pues en su momento este modelo fue bastante polivalente llegando incluso a correr en rallies como las 24 horas de Le Mans». En este momento añade una nueva curiosidad como es la palanca de freno de mano a la izquierda, cuatro marchas y overdrive (alargador de la cuarta marcha) pues entonces no existía la tecnología de cinco marchas, aunque esto no es privativo de este modelo. En estos días el cuenta kilómetros marca 29.335 «después de dar la primera vuelta por lo que realmente serían 129.335 de los cuales yo le habré hecho en torno a los 90.000». Para terminar dirige nuestra atención a los curiosos cierres de las ventanillas que después de tantos años son los originales pues como concluye Luis «estos coches estaba muy bien construidos».
Próxima semana: Juan Jiménez y su Triumph Spitfire
El felino que dio nombre a un coche y después a una empresa El primer Jaguar fue lanzado en el año de 1935. Este primer modelo de diseño deportivo se llamó SS90. Fue considerado como un orgullo de la industria automovilística inglesa de ese tiempo. Sería en 1938 cuando aparece el primer emblema de esta marca, pues el anterior de 1930 no fue aprobado por su fundador William Lyon. Al parecer la estatuilla se convirtió en obsequio para los compradores del deportivo descapotable SS90 o SS100, pasando posteriormente de nombre de un modelo de automóvil a convertirse en la marca de la empresa. Se atribuye al directivo Bill Rankin el apelativo de Jaguar por tratarse de un animal ágil y fuerte. En la actualidad Jaguar no es una marca británica ya que en 2008 Ford vendió las marcas Land Rover y Jaguar al grupo empresario hindú Tata Motors por la suma de 2.3 billones de dólares. |
|
VER GALERÍA DE IMÁGENES: