Como aclara Rafael Jesús López desde 1966, año en el que Andrés puso en marcha el Festival de la Canción y la publicación “La Comarca”, con 18 años, el también Académico correspondiente de las Reales Academias de Bellas Artes de Granada y Málaga y Presidente del Patronato de Estudios Alhameños, ha pronunciado más de un centenar de pregones algunos de los cuales se recogen en este libro con el que se pretende «reflejar una serie de emociones y sentimientos. Las que, a lo largo de todos estos años, se han podido ir exponiendo de distinta forma, pero no han dejado de ser permanente bagaje de su autor».
Escritos algunos sobre la marcha, otras de forma meditada ponen en evidencia «el sentir y el pensar a lo largo de los años de este alhameño de Málaga y malagueño de Alhama que es Andrés García Maldonado», al que tanto le deben las poblaciones en las que ofreció sus pregones. Para el periodista, Gonzalo Fausto, que también escribe unas notas preliminares «un pregón es un grito apasionado de convicciones. Es como unas íntimas impresiones dichas de un corazón apasionado a unos corazones anhelantes» al tiempo que califica al pregonero de «un hombre singular e irrepetible», además de «un hombre bueno en el buen sentido de la palabra machadiana».
Así mismo, recoge algunas de las presentaciones que precedían al pregón como es el caso de su admirado y amigo que fuera alcalde de Málaga, Pedro Aparicio, quien le dedicara unas emotivas palabras con motivo de su ‘Pregón de la Fiesta del Vino de Otoño’ en 1991 que fue editado como homenaje al cumplirse los cinco lustros de la llegada de su autor a Málaga y que comienza con las siguientes palabras: «Conocí a Andrés García Maldonado como adversario político en el Ayuntamiento de Málaga. Como es natural, pronto supimos ambos que tal circunstancia –la de la rivalidad oficial- era secundaria y luego irrelevante ante multitud de sueños y de complicidades morales que uno en otro fuimos descubriendo. Hablábamos de España (de su Alhama, de mi Madrid, y de nuestra Málaga), hablábamos de literatura, de historia, de libertad, de sentimientos… y seguiremos compartiendo ideas y hablando de todo ello mientras tengamos vida».
Ahora compartiendo páginas se podrán leer juntos su homenaje a la mujer alhameña, un pregón de Navidad, de la feria de Coín, del libro, del cantar de Andalucía, de la Flor, del Cenachero, de la Moraga, de Semana Santa, de la Cruz de Mayo, del Mar Nuestro, del Vino de Otoño, del Vino de la Tierra, de la fiesta de la Malagueña, de la pasa y del aceite de la Axarquía, de Fornes y los caminos sobre la mar, de la Mantilla, de la noche del Vino, de los Escritores, de Bengalbón, de Nuestra Señora, de Torremolinos, del Rastrillo de Nuevo Futuro y de la Chanfaína.