«Mi padre que en paz descanse, estando destinado en Lanjarón, compró un SEAT131. Yo tendría unos cinco años. Todavía recuerdo la matrícula, que era un GR 1080 C. Con él aprendí a conducir y le hice muchos kilómetros por eso me han gustado de siempre», cuente este vecino de Alhama de Granada nacido en Loja hace 45 años que es conocido popularmente por el sobrenombre de Paco ‘Pico’, apócope este de picoleto en clara referencia a la profesión de su padre que en paz descanse. Muy conocido en la ciudad de los Tajos desde que acabó sus estudios comenzó a trabajar primero como camarero en la Cafetería El Gallo hasta que decidió ponerse por su cuenta y abrir el bar Paco Pico, abierto desde octubre de 1994 hasta enero de 2005. Posteriormente adquirió el local y montó el Café Bar Los 80, trabajo que compatibiliza con su afición por los coches antiguos muy especialmente por los SEAT 131 lo que le lleva a afirmar que «hasta por las noches sueño con estos coches y arrancarlo me gusta más que escuchar a Pavarotti».
A los 131, le siguen en su particular ranking «el 124 y el 1430 que están hoy en día supercotizados, sobre todo los de gasolina, los de gasoil no tanto». Afición que comparte con otros paisanos alhameños y de otros lares organizando una concentración de coches clásicos que en el pasado mes de septiembre alcanzó su quinta edición con un gran éxito de participación . Entre ellos estaba su SEAT 131, eso sí antes de sufrir la espectacular transformación que le han convertido en una flamante réplica de los coches usados por la Guardia Civil en la década de los 70 y principios de los 80. «Este coche lo compré hace unos diez años por Internet. Su único propietario era un arquitecto, ya fallecido que vivía en La Zubia. Su hija me lo vendió pues hacía que se acordara mucho de su padre y me pidió que yo no lo vendiera nunca. Pagué por él mil euros y estaba en un estado bastante lamentable pues tenía las llantas picadas, los paragolpes rotos, sin batería,… pero me gustó porque estaba muy entero».
Hace unos meses comenzaría a darle forma a su sueño para transformarlo en uno de coches de Tráfico de la Guardia Civil con su característico color verde salvo las puertas blancas que son de color blanco y en las que ha sustituido el apelativo de la Benemérita por el de Auxilio en Carretera, junto con el nombre del pueblo y de su establecimiento. Así mismo, nos cuenta que la restauración la ha realizado en el taller Morauto de Alhama donde le han hecho «un buen trabajo pues me lo han saneado, le han cambiado las placas de la matrícula, para ponerle los números con sus relieves,…» . A ello le ha añadido otro llamativo detalle como es el de la lampara azul de la sirena y que tiene muy claro que salvo en una concentración o ruta no puede utilizar salvo que haya solicitado previamente permiso. Ahora espera disfrutar mostrándolo en las próximas concentraciones en las que tiene previsto participar tales como la de Villanueva de Mesía y Huétor Tájar donde se llevará a cabo una concentración de SEAT en el mes de abril.
|
Entre el SEAT 124 y el SEAT Málaga El SEAT131 fue el sucesor del 1430 y 124, aunque compartieron el mercado hasta 1980. Se fabricó entre 1975 y 1982. Posteriormente salieron el 1600, 1800 y 2000 que lo harían hasta 1985. Un corto período de tiempo en el que fabricaron estas versiones caracterizadas por sus buenos acabados, una motorización altamente fiable y una potencia realmente buena. Las versiones más avanzadas del 131 contaban con aire acondicionado, elevalunas eléctricos y dirección asistida. Sus sucesores serían el SEAT Málaga. Algunos modelos de estos coches se pueden ver en las películas quinquis de la época protagonizadas por ‘El Torete’ o ‘El Vaquilla’. Igualmetne en la película Coma, de 1978, se ve al Dr. Mark Bellows, personaje interpretado por Michael Douglas, conducir uno de color azul. Próxima entrega: Francisco Antequera y sus motos NSU de 1956
|