Tras los saludos de rigor y darle la vuelta completa al coche le pedimos nos cuente detalles de cómo llegó a sus manos a lo que responde «lo traje de EE.UU donde lo compré por un precio muy económico. Lo he reparado en el taller de mi propiedad, salvo algunas cosillas como la pintura que he recurrido a un buen amigo. Lo demás lo hice yo todo pues soy muy aficionado a la mecánica desde chiquitillo. Tiene una mecánica sencilla pues existe el carburador, el delco, las bujías, los platinos, la bomba de la gasolina,… Como decía mi padre habiendo gasolina y habiendo chispa tiene que arrancar». Cosa que hace a la primera cuando le pedimos que cambie de ubicación tras lo que continua ofreciendo algunos detalles más. «Al parecer había sido propiedad de un militar que en la guerra no tenía la gasolina racionada. Llevaban un distintivo por lo que a ellos le servían la gasolina que quisieran».
También le pedimos nos desgrane algunos detalles técnicos por lo que tras localizar la tarjeta técnica nos lee: Vehículo Marca Cadillac, tipo 66119, variante Sedan, 4 puertas, cinco plazas, tara 1850 kg, peso máximo autorizado 2.325; 5670 cc, 8 cilindros, potencia fiscal de 32,80 y 99 cv» datos que completa indicando sus dimensiones: 1.695 cm altura, 1.880 cm de anchura y 5.255 cm de largo. Así mismo, nos explica que el uso que le da es para el disfrute personal participando en algunas de las rutas programadas por su Club o el Club Veteranos de Granada con el que participó a finales de mayo en una ruta granadina. Para tenerlo siempre a punto nos desvela su secreto que no es otro que tenerlo guardado en cochera y «muy mimado», estando siempre pendiente del engrase y los niveles de aceite, arrancándolo al menos una vez en semana, y «pisando el freno varias veces para que no se oxiden los bombines». Por eso reconoce que «para tener un coche de estos no se puede depender del taller pues cuesta un dinero. Yo, por mis conocimientos y condición de jubilado, lo puedo hacer perfectamente».
Una vez completado el reportaje gráfico y recogidas los primeros datos nos interesamos por la historia del propietario. Miguel nos cuenta que se trasladó de sus Murtas natal después de hacer el servicio militar para trabajar en Almería, donde tuvo la oportunidad de coger la concesión de BMW y fue distribuidor de esta marca durante una década. En el año 93, junto con su hermano, decidieron vender esta concesión. Algunos directivos que le conocían se pasaron a Daewoo que comenzaba a introducirse en España y le ofrecieron la posibilidad de incorporarse. Después esta marca fue absorbida con Chevrolet que tenía instalaciones en Almería y Roquetas, donde ha estado hasta su jubilación.
|
Con el gusanillo por los coches antiguos desde muy joven La vida de Miguel es inseparable del mundo del automóvil. Tras su jubilación ese amor por ruido de motores y olor a combustible lo ha traslado al mundo del vehículo antiguo de los que tiene unas quince joyas entre otras un Chevrolet del 1930 y este Cadillac sedan del que nos comenta que «ya venía con su radio, tiene tres velocidades y marcha atrás, calefacción y funciona bien. El interior es el normal de la época y el salpicadero simple, pero muy bonito. El asiento delantero es corrido». Detalles exteriores e interiores que como no podía ser de otra forma atrae la atención allá por donde va y de que le haya surgido algún que otro compromiso por parte de amigos para que trasladaran a su hija a la iglesia el día de su boda. Termina aclarando que «en Almería hay mucha afición, entre otras cosas porque José Juan (el presidente del Club) nos ha ido induciendo la afición por los coches», aunque en su caso fue muy fácil pues cuando vio el primer coche antiguo «ya me entró el gusanillo y las ganas de tener uno». Así mismo, que el contar con este coche le ha llevado a hacerse socio del Club Cadillac de España cuya sede está en Valencia y con los que todos los años participa en una ruta cuya última edición, celebrada en la primera quincena de mayo, ha discurrido por tierras de Jaén, concretamente por Villanueva del Arzobispo, con excursiones al Pantano del Tranco, Dehesa de Puertolaca y Baeza Próxima entrega: Sonia Vidal Romero y su Seat 850 de 1970 |
|
VER GALERÍA DE IMÁGENES: