En palabras del autor, la exposición ‘Primaveras, orígenes, consecuencias y otras estaciones’ es un intento de “saldar la deuda” que tiene por haber nacido en un país de cultura árabe. Escogió un tema candente como es la Primavera Árabe, intentando plasmar sus orígenes y consecuencias a través del arte, para “pasar página y seguir adelante”.
Yamal-Din nació en Tetuán (Marruecos) en 1957. Reside en Granada desde hace 40 años, donde ejerce su labor como ceramista, escultor y comisario de exposiciones. Entre sus logros se cuenta la fundación de la Feria Internacional del Arte de Granada, que ya va por su octava edición. Yamal siempre se ha sentido atraído por la escultura. “Desde que era un niño en Tetuán y jugaba a construir esculturas de barro”. Esta vez, las esculturas no están hechas de barro, sino de hierro oxidado y cortado a mano. El artista explica que “las circunstancias que hay detrás de estas esculturas son duras: pobreza, hambre, guerra… El barro es demasiado blando para captarlas”.
“He trabajado el hierro a base de martillazos y fragua, como si quisiese interferir de algún modo en las circunstancias que han llevado a esta situación de hambre y de guerra, y que me han empujado a crear esta obra”, dice Yamal-Din.
La pieza originaria de la exposición es, como no podría ser de otra forma, “Alif”. Es la primera letra del alfabeto árabe, por lo que resulta apropiada como punto de partida. Por su parte, la escultura con mayor significado personal y social es la que tiene por nombre “¡Oh, Dios!” . “Si tuviésemos que hacer una visita guiada de esta exposición, empezaríamos por esa obra y terminaríamos en ella también, porque es la clave de la solución y del problema”, señala Yamal. “Dios es el origen de la paz y de la guerra, el origen de todo. En una cultura tan basada en la religión como la árabe, todos se apaciguan con el nombre de Dios, pero también matan en su nombre”.
Esta escultura es giratoria, y se mantiene en un equilibrio absoluto en los dos metros cuadrados que ocupa. Ello también tiene un significado, pues simboliza el frágil equilibrio de la paz de los países árabes. “También significa el equilibrio de la palabra para el mundo árabe, que se asemeja a un avispero”, explica Yamal. “Este equilibrio, muchas veces, se rompe por la intervención extranjera en las revueltas, que podría ser como tirar una piedra a la colmena”. Otra de las esculturas que pueden apreciarse en la exposición es “La puerta encerrada”. La puerta tiene un sentido fundamental en el pensamiento del autor. “Si te encuentras con todas las puertas cerradas, es que no estás en la puerta principal”.
En total, son nueve las esculturas que pueden visitarse en esta exposición de intenso significado. Yamal dirige una mirada a sus obras, y expresa: “Al fin y al cabo, eso es el arte. De una circunstancia absurda, del mal, siempre puede crearse algo bello”. La exposición se puede visitar hasta el al 19 de mayo en la Fundación Euroárabe Horario: Lunes a jueves, en horario de mañana y tarde. Viernes sólo mañanas.
