Como es habitual, Ceferino Navarro inaugura temporada con una exposición de escultura. En este caso del cubano Humberto Planas Camué (1975) que desde 2008 fijó su residencia en Granada. La muestra se denomina ‘De CapRicHos Y dE +’ pues, en palabras del artista, «se compone de una serie llamada ‘De caprichos’, la mayoría de ellos de una especie de nudos y el dE + porque hay otras piezas que no van incluidas en esa serie y que es el comienzo de otra nueva serie más que vendrá en el futuro. En total son trece piezas pequeñas de esculturas y 16 bidimensionales (dibujos)». Para el galerista en esta exposición Humberto Planas se mezclan dos ideas fundamentales en el nombre: la realidad junto a la utopía, es decir crear un objeto que puede ser utópico pero lo concibe en un espacio real». La exposición se puede visitar de lunes a viernes, de 11 a 13,30 h y de 16 a 21 horas, hasta el 18 de octubre.
Humberto Planas Camué estudio la licenciatura en Artes Plásticas con perfil en escultura en el Instituto Superior de Arte de la Habana entre 1998-2004, tiene muy claro que «siempre hay influencias. Si estudias Historia del Arte siempre hay algo que te va influenciando visualmente y conceptualmente. Chillida me encanta, Richard Deacon y Jorge Oteiza, también. Siempre hay influencias pero uno va buscando su propio camino y haciendo su propia firma», explica. Como curiosidad cuenta que cuando estaba en la Universidad se acercó un profesor para decirle que sus piezas tenían mucho parecido con las Richard Deacon y en realidad no las había visto nunca pues la información en la Habana era un poco complicada. El artista argumenta que «la realidad es que no puedes negarlo cuando ves las piezas, siempre hay algo de conexión. Si es original o no lo dirá el tiempo». A ellos añade Gian Lorenzo Bernini, «a pesar de ser un poco barroco y no tener nada que ver pero esa sutileza del trabajo que tiene también entiendo que hay que buscar en mis esculturas».
Planas llegó a granada en 2008, donde había estado con anterioridad en el año 2000, momento en el que expuso en la Galería Cartel y Laberintos, que ya no existen. Le gustó la ciudad y en 2008 tras estar becado en Grecia pensó establecerse en Barcelona pero luego optó por Granada donde tenía amigos, «así fue el comienzo de esta aventura en la que me encuentro ahora». Desde su llegada mantiene un taller en el Zaidín, además de un taller de carpintería que le presta un amigo, donde va dando forma a sus esculturas. Para crear sus obras primero parte de la idea de que es un encofrado, algo vacío. «En este caso yo lo llevo a las artes plásticas y mantengo el vacío. Ahora mismo no me interesa apuntalarlo como si fuese una construcción. Lo que hago realmente es hacer un tubo y después lo empiezo a cortar transversalmente, voy formado las curvas y haciendo poco a poco la escultura», responde al interrogarle sobre el proceso de creación de sus obras.
Así mismo, nos cuenta que vivir del arte es muy complicado y recurre al dicho de que «los artistas son los que viven del arte, los que no están reconocidos son los que hacen malabares. Por ahora yo estoy en el segundo grupo. Tengo que dar clases de dibujo y pintura para poder subsistir». Por su parte Ceferino Navarro se muestra satisfecho con la ampliación que ha realizado durante el verano en su espacio y por la elección de Humberto Planas con el que ya había trabajado de manera puntual pero no en exposiciones individuales. De su obra explica que «llama la atención tanto por el material -la madera- pero no como la concebimos en España, sino como un trabajo de filigrana y análisis matemático». En cuanto a los posibles destinatarios el galerista señala que «pueden estar concebida para un público joven, activo y dinámico al que le guste la nueva decoración y diseño, incluso minimalista. Los dibujos acompañan y comulgan muy bien con la obra. Por otra parte no olvidemos que esto es un primer paso hacia proyectos de gran formato que pueden ir relacionados hacia proyectos más amplios en los que deberían entrar instituciones».
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