Llegar a los 90 noventa y poder contarlo con gracia y sin apoyo de chuleta, tiene su mérito. Si, además, la persona homenajeada ha desarrollado una ingente actividad socio-educativa e intelectual, es un acto de justicia. Así lo ha considerado el Centro Artístico, Científico y Literario de Granada, con su presidenta a la cabeza, Celia Correa, y el Centro Unesco de Andalucía, que brindaban un merecido homenaje al maestro, investigador, escritor y poeta Miguel Carrascosa Salas (Torreperogil, Jaén, 1923).
Para la ocasión contó con la participación de tres de sus amigos o compañeros en algunas de las ‘empresas’ por él impulsadas, como es el caso de Ángel Bañuelos, presidente del Centro UNESCO Andalucía; el columnista de IDEAL y académico de las Buenas letras, Esteban de las Heras y el catedrático de la Historia del Derecho y escritor, José Antonio López Nevot. De la bonhomía del homenajeado daba buena cuenta el numeroso público que abarrotaba el salón de actos sabedor de que pasaría un rato agradable, dada la capacidad oratoria y excelente memoria del alpujarreño de adopción.
La anfitriona tomaba la palabra para saludar a los presentes y felicitar a Don Miguel, «por sus primeros 90 años que cumplió el pasado 13 de julio y porque sigue en plena productividad y vigencia, convirtiéndose en un ejemplo para todos». A continuación iría dando la palabra al resto de contertulios de los que realizó una somera semblanza, comenzando por Ángel Bañuelos, otro enamorado de la Alpujarra, además de sucesor de Carrascosa al frente del Centro Unesco Andalucía quien le cedió el cargo tras 19 años. En su intervención destacaría el reconocimiento que Órjiva le ofrecería en 2006 al declarle Hijo Adoptivo, también los libros que le ha dedicado a su querida Alpujarra que «deberían ser de obligada lectura para quienes gobiernan y administran el presente y futuro de esta tierra». Por supuesto, también relató los méritos de las obras que el homenajeado le dedicó al antiguo barrio de los Halconeros, o sea al Albaycin, donde reside. Todo ello sin olvidar su labor docente como director del Colegio Público Gómez Moreno y al frente de la Asociación ‘Amigos de una Escuela Mejor’.
Igualmente, Esteban de las Heras glosaría en su intervención los méritos de don Miguel con sus numerosas facetas, registros y saberes. Así comentaría su experiencia en la visita del carmen albaycinero de los Tahalíes, con su precioso jardín y maravillosas vistas que inspiran a su morador «poemas que recita al visitante y deja así constancia de su privilegiada memoria». De todo lo cual podemos dar fe. Igualmente resaltó su labor en pro de la Biblioteca Pública, próxima al citado colegio y a la que recientemente se le ha puesto el nombre de ‘Juan de Loxa’. Por su parte, López Nevot se centró más en la faceta poética de este «conversador excepcional» que regala el oído a los visitantes «con una casi ininterrumpida sucesión de poemas, declamados con una dicción clara, precisa y emocionada». Tras ‘La Alpujarra en coplas y otros poemas, (1988), Miguel daría a la imprenta ‘Poemario del atardecer: Antología I (2010) publicado por el Ayuntamiento de Granada y prologado por Fernando de Villena. La segunda parte de esta antología dividida en cuatro secciones (Poemas religiosos, Poemas heridos, Otros poemas y Poemas románticos) espera ahora el apoyo de alguna institución para ver la luz. Al final intervendría Miguel Carrascosa, quien volvió a demostrar una vez más sus dotes oratorias y su buen humor, atendiendo las peticiones del respetable entre el que se encontraba antiguos compañeros del Ave María, amigos y alumnos.
NOTA: En los próximos días publicaremos los textos que los integrantes de la mesa dedicaron al homenajeado.