Pasan los años y los estúpidos siguen siendo estúpidos; ahora todo el mundo aplaude las memeces, nunca mejor dicho, de la alcaldesa de Madrid y de otros lugares. El que la señora Carmena haga cosas buenas no quiere decir que sea religión. Y ya el año pasado se retrató en cuanto a la cabalgata de Reyes y los comentarios que hemos hecho algunos sobre la desilusión de los niños, lo seguimos manteniendo, pero con respeto para todo el mundo.
Ahora, la moda es quitar los belenes, cabalgata de reyes y todo aquello que durante años nos ha enriquecido en cuanto nos hacía ser felices con cosas imaginarias y que todos los niños de entonces y de ahora no creo nos haya creado ningún trauma.
A todos los pseudo izquierdistas, habría que decirle que esto no es laicismo. Esto se llama sencillamente atentar contra la cultura, las tradiciones conformadas durante siglos y, especialmente, contra la ilusión de los más pequeños.
A lo mejor es que los progres estos nunca fueron niños, o en vez de Reyes Magos a sus casas venía Karl Marx y les traía El Capital. Pero no pueden ser más ridículos, no van a poder con la tradición cristiana, les sacamos dos mil años de ventaja. Sigan con sus fobias y sigan siendo unos amargados
La izquierda, como siempre ha quedado retratada, no por su antirreligiosidad, sino por su ridiculez. El cambio de reyes magos por reinas magas, un episodio de la tradición cristina que forma parte de nuestra cultura, ha sido convertido en acto carnavalesco. La izquierda, una vez más impone su ideología totalitaria que atropella la libertad individual del hombre. Con estos nuevos dirigentes, España va abocada al abismo y más allá.
Lo más importante, como ya dije esta mañana para ellos es el acto carnavalesco de la cabalgata, pero creo hay cosas más importantes en Madrid y en España que meterse en camisa de once varas. Pero claro, los quisquillosos de siempre sonríen a carcajadas lo que nunca entendieron, la tolerancia.
A pesar de todo, os deseo que los reyes os hayan traído muchas cosas!
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Comentarios
Una respuesta a «Antonio Luis Gallardo Medina: «Una reflexión a cabalgata pasada»»
Ya vienen los Reyes Magos, ya vienen los Reyes Magos cargaditos de… de, ¡ah!que no vienen.
Sin ser una devota de las navidades ni de sus productos, lo cierto es que la tradición debe ser respetada como patrimonio de nuestra historia. Más allá de toda ideología política debería imperar la coherencia.