Y aún se atreven a decir que tenemos lo que votamos, váyanse a la mierda todos los manipuladores de una u otra ideología, que lo único que pretenden es confrontación entre unos y otros; pero lo realmente importante es la incultura que padece este pueblo nuestro español. Incultura fomentada por la derecha tantísimos años y por la izquierda porque nunca la tuvieron. Los datos lo dicen todo, el año pasado, el 40% de los españoles no leyó un solo libro. Hay que leer más, mucho más y poder decidir qué queremos de verdad.

Siempre estamos diciendo que mañana, tal vez, quizás, puede ser un gran día…un gran día para adelgazar, para enamorar, para enmendar la plana a más de uno, para elegir nuevo gobierno, para echar a todos los miserables, para reparar los daños causados e incluso arreglar el coche roto, para pedir una sanidad digna para Granada, pero somos tan vagos y tenemos tal desidia que ese mañana nunca llega… anímate y adelanta un día…vamos!

Cuando uno tiene tiempo para leer, ver y oír como tenemos los jubilados, se da uno cuenta del poder omnímodo de la prensa y de cómo nuestros políticos y gobernantes no se enteran de por dónde va el mundo. Quieren desviar el tema con encuestas sobre la Monarquía, intención de voto, independencia de Cataluña y otras zarandajas que en verdad nos interesan un rábano. Pregunten a sus vecinos, hablen en la calle, comenten con la gente de a pie y verán que sus preocupaciones son otras, que tenemos tres millones de parados, casi el 50% de los jóvenes sin futuro, que a la gente se les echa de sus casas, que el estado de bienestar está en peligro y que a los que no podemos ni siquiera ver u oler son a esos políticos embusteros, chabacanos, corruptos y que tanto daño han hecho a este país.

La decepción es una de esas cosas que cuesta mucho enfrentar, está ahí, esperándote. Lo dejas para mañana, para el siguiente, y te vas dando excusas. Alguien dijo, no culpes a la gente por decepcionarte, acepta que es tu culpa por esperar demasiado de ellos. “Las personas cambian con el tiempo… o el tiempo te muestra lo que en realidad son”.  Nunca te desesperes, pues parece que la vida con los años se nos escapa más rápidamente. Disfruta y se tú mismo en cada momento, sin importarte nada ni nadie. Animo aún estás a tiempo! La vida pasa tan deprisa que a veces el alma no tiene tiempo de envejecer. El amor puede ser de muchos colores y sabores, hay amores que matan y amores sosegados y dulces. En el amor caben muchas posibilidades y no siempre el amor es ciego…

Siempre debiera ser el día de los Santos Inocentes, el día de esos a los que se les acusa de «vivir por encima de su posibilidades» por tratar de obtener cierta calidad de vida cuando otros se llevaban millones de euros gracias a la corrupción y la especulación, es el día de los que trabajan hasta 14 horas diarias y desde el gobierno se les pide que arrimen el hombro, que no sean vagos y quejicas, es el día de los que se les exige que se aprieten el cinturón cuando se les juntan las tripas con el espinazo mientras otros se sobrealimentan con marisco, ese día es para esos que son expoliados de sus recursos y riquezas y que luego se les niega la sanidad y un lugar para vivir, siempre es el día de la gente a la que se nos roba la dignidad al grito de un «que os jodan» empanado de aplausos.

Mientras el Gobierno no sabe por dónde irán los tiros, la oposición hace tiempo que desapareció sin combate alguno y los poderes fácticos hacen todo lo posible e imposible para que nadie se mueva. El otro día leí un cartel que decía…“Son comunistas hasta que se enriquecen, feministas hasta que se casan y ateos hasta que el avión empieza a caer.” Inocentes sí, pero que se atengan a las consecuencias pues siguen sin saber leer las encuestas y los inocentes no olvidamos a los pelagatos y compañía.

Hoy, este relato está lleno de pensamientos sueltos y deshilachados, pero que reflejan muy claramente mi estado de ánimo.

Ver ARTÍCULOS ANTERIORES DE ANTONIO LUIS GALLARDO MEDINA

• Facebook
• X
• LinkedIn
• Whatsapp