‘Huellas: tradición y contemporaneidad’, es el título que han elegido los integrantes del colectivo COCER (COlectivo de CERamistas de Granada) para dar a conocer sus trabajos en la Biblioteca de Andalucía. Los visitantes pueden contemplar hasta el 19 de junio, en horario de tarde (de 18:00 a 20:00 h y el 19 de junio de 11:00 a 14:00 h.) una selección de piezas de Roberto Casares, Jorge Conde, Lucía Díaz, Rogelio Enríquez, Rosa García, Alfonso Hidalgo, Martha Little, Mercedes Lirola, Miguel Ángel Lorente, Andrea Martorana, Lola Moral, Ángel Montero, Cecilia Puzo, Natalia Rojo, Esperanza Romero, Shuaib Sánchez, Tanykerami, y Maya Vergel.
Esperanza Romero, en representación de este colectivo, nos cuenta que la finalidad de esta Asociación no es otra que «dar visibilizar y compartir con el público granadino la amplia red de artistas, artesanas y artesanos, historiadores e investigadores del ámbito cerámico, existente durante varias generaciones en esta capital, uniéndose para acercar el rico y diverso universo de la cerámica a sus ciudadanos». También que la muestra se inició con un sencillo acto inaugural con unas palabras de bienvenida de la directora de la Biblioteca y unas breves palabras por su parte en nombre de la Asociación supiera de qué va. «En total, en esta exposición se muestra la obra de 18 ceramistas de obra muy variada, desde la cerámica tradicional granadina, pasando por otra mudéjar, de lustres, hasta obras contemporánea de muy diversa factura», señala al tiempo que reconoce que ha sido fácil poner de acuerdo a los ceramistas para que muestren sus piezas aunque evidentemente cuesta trabajo que hermanen 18 artistas pues «tenemos cristalizaciones, obras con una base de actuación, otras con un tono conceptual,… cada uno con lo que está trabajando en estos momentos y con propuestas muy diversas. Os invito a que vengáis a verla porque es muy bonita y variada».
Uno de ellos es Ángel Montero que nos explica que su aportación ha consistido en un par de piezas de arcilla refractaria negra, una llamada ‘Derviches’ y otra ‘Vértebras’ con las que reflexiona «acerca del movimiento de la articulación de las formas y un poco la búsqueda de formas esenciales de la naturaleza y de su plasmación de una manera abstracta y orgánica». Cuando le preguntamos si los ceramistas pueden vivir del arte responde que «es bastante complicado. De vez en cuando salen encargos y se venden cosas, pero la mayoría de nosotros lo tenemos que complementar con otras actividades, en mi caso, por ejemplo, con la enseñanza artística. Está claro que la gente se gasta antes el dinero en un teléfono móvil, que yo también lo entiendo, pero le parece mucho el dinero que tiene que pagar por una obra de arte que va a ser para toda la vida, e incluso para sus descendientes. Hay poca gente que tenga ese tipo de sensibilidad. Al final tener un taller para poder trabajar se va convirtiendo en un lujo aunque para algunos de nosotros sea una necesidad».
OÍR AUDIO DE LA ENTREVISTA A ESPERANZA ROMERO Y A ÁNGEL MONTERO:
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