El sábado 8 de junio de 2019, la Asociación de Orientadores de Granada, con representación en Jaén y Almería, celebró su XIII Convivencia Anual. Este año la convivencia se ha reducido a un almuerzo en un restaurante de la capital y reunión un nutrido grupo de compañeros en un almuerzo que ha supuesto el final del curso 2018-2019.
Como todos los años se reconoció a los compañeros socios que en este curso se han jubilado: Manuel Peula López, orientador del IES Alhama de la misma localidad granadina y Pepe Fernández Prieto, orientador en el Instituto Provincial de Educación Permanente de Granada.
Tras el almuerzo en la sobremesa, Juan Diego Chica Maestre dedicó unas emotivas palabras de reconocimiento y cariño a su gran amigo Pepe Fernández. Del mismo modo Paco Rivera y Antonio Atienza dedicaron palabras de admiración a Manolo Peula. Se les hizo un merecido reconocimiento a su trayectoria personal y profesional.
La presidenta de ASOSGRA, C. Patricia Díaz impuso el pin de plata de la asociación a los homenajeados destacando su gran trabajo como orientadores educativos a lo largo de sus vidas profesionales.
Un año más, un magnífico acto que supuso el reencuentro de muchos compañeros y compañeras unidos por la Orientación Educativa y el compañerismo.
Juan Diego Chica dedica unas palabras a Pepe Fernández
¡Buenas tardes a esta pléyade de profesionales que de manera tan especial incide en el devenir educativo comunitario e individual de las generaciones de hoy; pura sazón del guiso educativo, tinte de calidad del engranaje educacional! Sacar a colación la Orientación, y a quienes la ejercen, es sinónimo de excelencia en la planificación y el desarrollo de los sistemas y procesos educativos ¡Cuántos de los que estáis aquí presentes habéis contribuido y seguís contribuyento a ello¡ Un ejempo, por poner uno solo, es aquel que inspira estas palabras, nuesto compañero Pepe, Pepe Fernandez, Pepe Fernandez Prieto.
¡Hola Pepe! ¿Sabes? He tenido suerte. Me han encargado que te dedicara unas palabras en este Acto que con motivo de tu jubilación estamos celebrando (te confieso que lo esperaba, y que si se les hubiese pasado, habría reclamado con descaro el ‘derecho’). Digo suerte, y digo bien, porque es como si me diesen la oportunidad de enarbolar un triunfo, un trofeo, (vamos, que me siento como un Casillas cualquiera, anteayer mismo, alzando alguna copa de la Champions )… Porque un trofeo es haberte conocido, haber colaborado, compartido, disfrutado, en algún momento también sufrido, tantos avatares, de esta puñetera profesión que amamos, a la que tantos años y esfuerzo has dedicado, que tanto nos ha ayudado a crecer y nos ha dado, y a la que has entregado lo mejor que has sabido y podido.
Oriundo de la Córdoba crisol de civilizaciones, tu infancia queda marcada por el amor a la cultura que destila la ciudad que mil años atrás fuera el epicentro del mundo conocido. Tu adolescencia abraza la luminosa influencia del Atlántico; la isla de Gran Canaria con su espectacular naturaleza acompaña tus primeros pasos hacia la juventud. Después Sevilla, allí emprendes los estudios de química como opción académica, que cincelan el perfil científico de tu carácter, y más tarde Granada, en donde los Dioses te tienden la trampa de la Pedagogía, y afortunadamente caes en ella y todos ganamos a un humanista firmemente anclado en la perspectiva científica ¡Todo un lujo!
También en Granada te esperaba la mujer de tu vida (detalle… en breve).
El universo educativo y la mirada desde la ciencia, las dos componentes del biciclo que ha marcado tu personalidad, y mira tú por donde que es el ciclimo y su versión motorizada la que ha sido tu pasión deportiva, que más de un disgusto te ha dado, pero seguro que también inmensas satisfacciónes: la subida a pedal desde Granada al Pico Veleta, sin ir más lejos, es testigo.
Tú, Pepe, eres de la estirpe que a nadie deja indiferente, por tu personal talante que hunde sus raíces en la búsqueda de la verdad, (siempre de la mano del humanismo y de la razón), por tu meridiano sentido de la equidad y de la justicia, por tu sinceridad en el trato y por tu elegancia en la relación. “Al pan, pan y al vino, vino” te cuadra bien. Aliado de la precisión, compañero de la prontitud, fiel amigo del detalle, cumplidor hasta el rebose, admirador del ingenio, exigente con la palabra dada, testigo fidedigno, reconocedor de la virtud,… y por contra, decidido adversario de la improvisación y de la gestión deshilachada, desenmascarador de la intención torticera y perseguidor del bulo y de la trampa,… podría seguir… aunque basta para dejar trazado un esbozo de tu ser y sentir.
¿Como profesional? Pues.. aplíquese lo dicho…siempre me fue dificil contigo establecer diferencias en el trato como persona y como profesional. Eres como los grandes actores, cuya grandeza radica en ser el mismo en la vida real que en el escenario o la pantalla. El verdadero espíritu de equipo y de colaboración te definen; ciertamente capaz de escuchar, y también de vibrar en la aventura de la educación integral de la comunidad educativa.
¿Y como amigo? ¡qué ineficentes se muestran las palabras cuando de glosar la amistad se trata! Tú, quizá no lo sabes bien, o incluso te cueste admitirlo (porque eres de una humildad que pone firme), has sido inspiración para mí en muchas ocasiones, fiel confidente, apoyo y fuente de criterio. Te estoy enormemente agradecido. Ya en los textos sagrados se habla de la amistad como refugio seguro, como tesoro para quien la encuentra. Es el caso.
Has puesto punto final administrativo a tu itinerario profesional, pero todos sabemos que eres de los que no se jubilan. Quien está a tu lado sabe de tu ánimo curioso, que es la palanca que genera la actividad investigadora que, a su vez, condiciona el avance del conocimiento y el descubrimiento científico. Creo que al libro Guinness de los récords le falta una entrada, porque has sido el primero, y sospecho que el único Orientador que tras finalizar su trayectoria profesional, se matricula en un…¡Ciclo Formativo de Grado Medio!… para cimentar tus conocimientos en electromecánica. El gran filósofo lo expresó en el ocaso de su existencia: “Sólo sé, que no sé nada”; casi dos milenios y medio después, tú llevas a la práctica este pensamiento, que es parte esencial del andamiaje cultural de Occidente.
La vida te dio una gran mujer, Manuela, que es lo que suele haber junto a un gran hombre, y dos hijos, en quienes has sembrado verdad y sabiduría, semillas que, a todas luces, han fructificado y lo siguen haciendo. La musas te han asistido pero, como Picasso, bien puedes decir que siempre te han hallado trabajando.
Un hombre que lucha, vence, y si vence, llega, y si llega conoce el triunfo, y si triunfa es que merece la pena vivir. Permíteme recordar y aplicarte las palabras de Heródoto: “Para aquel que considera el combate como un deber, la desproporción de fuerzas es irrelevante”. Gracias Pepe, por tu furia contenida frente al desafuero, por tu entusiasmo silente ante el reto, por tu constante prudencia en el fragor de la lucha cotidiana.
Bienvenido a este espacio que, de corazón deseo para ti, sea de sosiego, de creatividad y de auténtico júbilo.
Muchas gracias.
Juan Diego Chica Maestre
Palabras de Manolo Peula: Despedida y cierre
En algún sitio he leído que suelen hacer falta no menos de tres semanas para preparar un discurso “improvisado”. Yo, como los buenos estudiantes, he intentado pergeñarlo a lo largo de la tarde noche de ayer viernes. Aquí estoy, con la chuleta en la mano,
esperando no confundirme mucho, y con la esperanza de no meter la pata en demasía.
Lo cierto es que bastantes de vosotras, de vosotros, sabéis que soy notablemente pesado en el regate corto, de verbo fácil en el cuerpo a cuerpo, pero hablar para tanta gente… eso es harina de otro costal. ¡En fin, Vamos a ello…
El último día que compartimos tarde en el Carmen de la victoria, Ramón Barrera nos deleitó con veinte palabras para el 20 cumpleaños de ASOSGRA, a mí hoy solo se me ocurre una y repetida…
GRACIAS. Gracias a quienes habéis organizado todo este evento.
Gracias a los que han intervenido por lo que han dicho y gracias a los que no habéis hablado, pero estáis aquí. En apenas unas semanas se acaba un curso que para mí se ha convertido en especial.
He cerrado mi trayecto profesional, un capítulo importante de mi vida, pero con la convicción de que quedan otros por escribir, quizás en orientación, seguro en otras facetas.
Hoy, debería ser un momento de balances, de recuerdos, de emociones, de agradecimientos, pero os aseguro que sería extenso y “pesao”, y más de 37 años de trabajo dan para mucho.
GRACIAS. Me siento tremendamente afortunado. Reconozco que he tenido la suerte de haber trabajado en la profesión que he escogido. Pasé de ser un estudiante de ciencias puras a descubrir la educación especial y la logopedia (así se llamaban por los
años 80) y entender que adquieren pleno sentido dentro de la orientación. Ahí he dedicado mis últimos 20 años de aprendizaje.
Mis inicios en el trabajo de la orientación se remontan a los años 80 en E. Primaria
Un poco de historia: En el curso 84/85 cuando los SOEVs, con sede en calle Ganivet, iban de pueblo en pueblo con sus pruebas de capacidad y con los EPOEs recién creados, se desarrolló una experiencia piloto en algunos centros de primaria donde se
asignó un orientador para realizar tareas propias de nuestra especialidad. ¡Lástima, duró solo un año!
Aunque trabajé estrechamente con diferentes EPOEs, y con algunos de los equipos de delegación coincidiendo con los inicios de nuestra asociación, mi adquisición de esta especialidad coincide con la creación de ASOSGRA.
En mi caso, como casi todos los que empezamos en este oficio en el último tercio del siglo pasado (jooo qué lejos suena) veníamos de Primaria. Yo, tuve la suerte de encontrame con un grupo de grandes profesionales a los que me honro de considerar
mis amigos y que me ayudaron a dar los primeros pasos en este noble trabajo.
Aprendí de mis compañeros, de mis compañeras, de sus buenas prácticas y, al mismo tiempo, de su generosidad para compartir experiencias y ponerlas a disposición del grupo. Ya entonces planteábamos el trabajo colaborativo como herramienta de mejora
en nuestras funciones.
Fueron los inicios de ASOSGRA. Una aventura que empezamos unas pocas personas y que hoy es una realidad en la orientación en el ámbito provincial, autonómico y del estado.
Hubo muchas tardes de reuniones en el IES P. Manjón, en cafeterías, en el IES Virgen de la Nieves, siempre buscando mejorar en nuestro trabajo con la ayuda de los demás, siempre con generosidad. Ilusiones convertidas en herramientas de
aprendizaje…, en herramientas de enseñanza (que diría J. Antonio Marina)
Diseñamos proyectos no sin dificultades en algunos años en que todo estaba por hacer en la orientación. Con cierta perspectiva histórica hemos avanzado mucho, muuucho aunque todo está por mejorar.
Crecimos profesionalmente a la par que nuestra especialidad. Hemos pasado de ser considerados “intrusos” en los centros a dotar de un plus de calidad a todos ellos.
Durante estos años hemos vivido reformas y contrarreformas. Sobrevivido con los papeles. Conocido a Séneca. Más papeles, más Séneca, más protocolos y rúbricas, más informes… Hemos pasado de la soledad en los centros a la complicidad a través de las redes sociales.
GRACIAS. Mi profundo agradecimiento a todos mis compañeros y compañeras, los actuales y los pasados a los que hoy no nos pueden acompañar pero que les hubiese gustado estar. A veces, en estos años, he pensado si la profesión nos modela como
personas o si somos nosotros los que adaptamos nuestro trabajo a nuestra forma de ser y de entender la vida.
Gracias a todos por lo que he recibido tanto profesional como personalmente.
Este curso, la administración me ha ofrecido tiempo y no he dudado en tomarlo.
Tiempo, más tiempo, tiempo para escribir otros capítulos de la vida, tiempo para regalar, tiempo para disfrutar y no he dudado en cogerlo ahora que tengo ganas de él y que en casa podemos compartirlo con mi mujer María y con mis hijos.
Ahora que empiezo a tomar cierta perspectiva de nuestra labor, permitidme una sugerencia. Cuidado con la zona de confort en el trabajo. Huid de ella, salid al más mínimo indicio de autocomplacencia, rutina o desmotivación por lo que hacéis.
Nuestra profesión exige personas implicadas en la mejora de la educación.
Bueno esto se acaba, estoy en el momento que M. A. Santos Guerra denominó el momento de los adioses, de las separaciones. Decía que “Hay que preparar el corazón para los adioses. Para recibirlos cuando nos vamos y para darlos cuando alguien se
va. Hay que saber encajar los adioses de manera que nos hagan fuertes y sólidos en la vida emocional. Nuestro yo se hace fuerte a fuerza de dar y recibir adioses”.
Termino tomando prestadas unas palabras de Patricia de Benito de su libro Primero de Poeta “a veces es bueno sacar las alas y volar, soltarse para avanzar”. He acabado un capítulo de mi vida del que, con sus altibajos, me siento orgulloso y en enero comencé otro, que está siendo rico en experiencias y espero poder seguir compartiendo algunas con vosotras y vosotros. El trabajo activo termina, la amistad no caduca.
MUCHAS GRACIAS. “Lucky”
Manuel Peula López
6 junio 2019
Intervención de Antonio Atienza y Paco Rivera para Manolo Peula
Amigo Manolo, en este momento en el que celebramos tu jubilación constatamos la fugacidad del tiempo Que breve parece todo. ¡Cuando menos te esperas ya estás jubilado!
Así que tenemos que mirar hacia atrás para recrear el presente porque no podemos explicar lo que somos sin saber las experiencias que hemos tenido.
Hay un sitio en el que nuestros caminos se cruzaron, la asociación de Orientadores de Granada, pero fue la elaboración del libro: “Educación Secundaria, organización, funcionamiento e itinerarios” cuando trabajamos cuerpo a cuerpo con otros compañeros y compañeras para que éste saliera adelante.
Muchas reuniones y muchos viajes, sobre todo para ti y Antonio, que lo tengo a mi vera. Tu venías de Alhama, y Antonio de Alcalá. Cuando teníamos reunión los dos estabais allí, generosamente, nunca mejor dicho “por amor al arte”. Y es que, nos consta, que tu tarea de orientador se fue fraguando desde el convencimiento que el trabajo que desarrollábamos era desde la creencia en nuestra profesión, desde la VOCACIÓN con letras mayúsculas. ¡Qué bonito! Trabajas en lo que te gusta, y encima te pagan, pero… como bien sabes “NO TODO SON ROSAS” en esta profesión.
Después de aquello, hemos compartido muchos encuentros en ASOSGRA, y también, muchas llamadas en las que comentábamos casos, o simplemente hacíamos TERAPIA entre nosotros, así íbamos avanzando. Lo que compartes, se hace más llevadero. Pero también hemos compartido muchos materiales. ¿Cuántos profesores de Secundaria pueden decir lo mismo? Y es que el trabajo de orientador es un trabajo, en el que a veces, te encuentras muy solo, y hay fuerzas, más poderosas que tú mismo.
Y por tanto, creemos que todos estaremos de acuerdo en lo siguiente:
SOMOS ASESORES Y NO TENEMOS EL MANDO DE LA NAVE. SE LLEGA HASTA DONDE SE PUEDE LLEGAR, ¡SI NO TE QUIERES QUEMAR! ESO NO QUITA QUE HAGAMOS LO POSIBLE POR MEJORAR NUESTRA REALIDAD
Nos constan las horas que le has echado a la Orientación, la cantidad de materiales que has elaborado y compartido, y no precisamente, en el Departamento de Orientación, sino en tu casa. Y ahora que ya lo tenías casi todo elaborado, PUES TOCA JUBILARSE, porque si no, podemos terminar como el de la Mancha, y así podríamos iniciar un nuevo libro que empezaría así:
“En un departamento de cuyo nombre no quiero acordarme no a mucho tiempo que vivía un tal Manolo, de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor… Se daba a leer libros de orientación con tanta afición y gusto, que se olvidó casi de …”
Afortunadamente, este libro no se va a publicar porque hay vida más allá de la ORIENTACIÓN, aunque pensamos que si realmente escribiéramos ese libro terminaría de esta forma:
“Este tal Manolo llenósele la fantasía de todo aquello que leía sobre normativa, bullying, tutoría, reuniones de tutores, padres, madres, niños …. así que, un día, se le iluminó la bombilla y decidió que ancha era Castilla, y más Alhama. Allí estaba su familia, sus almendros, sus uvas y, el otro día nos enteramos, que también sus cerezos.”
Luego … realmente no te has jubilado … has cambiado de profesión, QUE YA TOCABA, has cambiado tu departamento, por tu casa y tus cultivos.
¡QUÉ MEJOR FORMA DE ORGANIZARSE, SI QUIERES JUBILARTE!
Ahora, TE VAMOS A RECORDAR LAS REGLAS QUE DEBE SEGUIR UN BUEN ORIENTADOR JUBILADO.
1ª REGLA: Si alguna mañana suena el despertador, no te alteres, ya no tienes que ir al COLE, ya estuviste mucho tiempo en él.
2ª REGLA: Si aparecen pensamientos negativos, no dejes que se apoderen de tu mente, eso no te puede ocurrir a ti, ¡recuerda que has sido orientador! Visualízalos como si fueran troncos que van río abajo, déjalos marchar y pronto los perderás.
3ª REGLA: Si coges el ordenador, ¡Qué no te entre el pánico! Ya no tienes que pensar en que tienes que hacer un INFORME, elaborar un protocolo de ACOSO, o pelearte con el CENSO. Además, no te empecines, ya no tienes las claves para entrar en SÉNECA.
4ª REGLA: Si quieres ir a tu centro, ve, pero di que vas de visita, y no A ORIENTAR. Y ésta regla nos consta que la estás infringiendo.
5º REGLA: Es obligado que consultes con PEPE GINÉS, un jubilado con amplia experiencia, el variado programa de actividades que se ofertan. Él te orientará adecuadamente. Así que… ¡no tanto campo, hombre!
6ª Y ÚLTIMA REGLA: la más importante, SÉ FELIZ DÍA A DÍA junto a los tuyos.
Gracias por tu contribución a ASOSGRA y a la ORIENTACIÓN,
Recibe un fuerte abrazo, y ahora disfruta todo lo que puedas, que te lo mereces.
Antonio Atienza y Paco Rivera
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