Donde la mayoría de los mortales solo ve desolación y abandono, hay determinadas personas que se emocionan y convierten dichas estampas en obras de arte. Este es el caso del granadino, Juan Jiménez Barrera (1952), que firma sus fotos con Jujiba, nombre con el que es conocido en las redes sociales y que en la tarde del miércoles se inauguraba en el Centro Artístico de Granada con la participación del vicepresidente, Juan Chirveches y la polifacética, Marijose Muñoz. La muestra la ha denominado ‘Mis paseos’ y se compone de 26 imágenes de lugares abandonados, tomadas en distintos rincones de Granada.
«Me gusta la fotografía. Un dia vi una casa abandonada y me trajo buenas sensaciones. Ahora salgo todos los domingos a buscar casas abandonadas», así nació su afición surgida hace seis años y que se ha transformado en miles de fotos. «No sabría decir cuántas fotos. He hecho una inmensidad de fotografías, pues cuando regreso de casa salida suelo descargar entre 160 y180. Desde el año 2014, he llenado tres discos de un terabye cada uno», comenta.
Rincones de casas, cortijos, molinos y almazaras son el objetivo de Jujiba siempre que cumplan la condición de ser lugares abandonados varias décadas atrás. Este fotógrafo aficionado que comenzó con una Kodak Fiesta y ahora hace las fotos con una Canon EOS 77D reconoce que su debilidad son los juegos de luces provocados por los rayos solares al atravesar puertas y ventanas. También aquellos objetos que en su marcha dejaron los antiguos moradores: ropas, un oso de peluche, una bicicleta, una pelota, revistas, cuadros,… que, mudos e inertes, parecen aguardar la vuelta de sus primitivos dueños.
Nacido en el Barrio de San Lázaro y residente en la actualidad en Armilla, durante su etapa laboral fue agente comercial lo que le ha permitido recorrer toda la geografía española y ahora, tras su jubilación, dedicarse a sus tres grandes pasiones: la música, el teatro y la fotografía. Ahora para dar rienda suelta a esta última ha recorrido toda la provincia buscando estos espacios abandonados. Las fotos expuestas, realizadas entre 2016 y 2019, fueron tomadas en la Venta de la Cebada, en la Antigua Carretera de Motril, en la carretera de la Cabra, en una antigua vivienda de Lapeza, en el municipio de Purullena, en el entorno del Pantano de Cubillas, por la carretera de Alhama, o en el paraje de la Venta de la Cebada, o de la Ventá de la Colorá…
Cuando llega a uno de estos escenarios, siempre se deja llevar por la primera sensación que percibe e imagina las situaciones. ¿Cómo sería el dueño o la dueña del osito de peluche que ahora contempla sobre un sucio colchón, en una antigua fábrica de aceite abandonada? ¿Quién dejó la chaqueta colgada en la ventana, en una calurosa jornada? ¿Qué desplazamientos realizará el propietario de la bicicleta que aparace sin ruedas, solo el cuadro, manillar y sillín? ¿Quiénes se sentarían en estas tres sillas destartaladas o en esos sillones raídos que dejan al aire los muelles? Espacios, otrora llenos de vida, ahora naturalezas muertas, en las que entra el sol por la parte superior pues, en muchos casos, no hay tejados, y los objetos aparecen rodeados de excrementos de aves y roedores.
Jujiba imagina en unos casos, la sala de espera de una consulta médica, en otras dos abuelas charlando, en otras a un novio al otro lado de la ventana o la última comida de una familia que tomaron antes de abandonar la estancia a su suerte. «Me da pena que la gente las vaya destrozando. Me gustaría que una vez vistas las dejaran como están. A mi me traen sensciones y vibraciones, por eso las fotografío para que la gente disfrute como yo he disfrutado» explica antes de añadir que le gustan las 26 expuestas pero que si tiene que elegir tres, éstas serían la de la bicicleta, las zapatillas, la puerta verde y el osito. La exposición se podrá visitar hasta el 3 de octubre, en horario de 18:30 h a 21:30 h. En el acto inaugural, la poeta y pintora, Marijose Muñoz, le dedicará uno de sus textos titulado ‘La belleza abandonada (capturas de un fotógrafo)’.
TEXTO DE MARIJOSE MUÑOZ
La belleza abandonada (capturas de un fotógrafo)
Cada día abandonas la sensación de lo confortable, adentrándote en un mundo frío, dónde sólo existen restos mohosos de tantos sueños devorados, abrigado sólo por la luna bordeas la cuneta de la vida y sientes en la nuca el roce de la paz del alma,
ya despojado de tu corbata cotidiana.
Una vez el abandono comienza la conquista de tu cámara, existe el riesgo de querer habitar todo lo demasiado olvidado por tantos. Tan ligero de equipaje Juan, deambulas por aceras sucias,las suelas de los zapatos empapadas de fruta podrida y cristales rotos, hierbas que cortan una entrada, que nadie cruza.
Siempre el sol en la nuca y la cámara en la mano, con una nostalgia peor que la del olor a pan blanco recién hecho. Lo abandonado tiene por bandera una camisa sucia
y arrugada al viento, de un mundo pasajero que ya nadie visita, unos ojos de gato que miran sin pedir nada, una chimenea vacía, un silencio tan amplio que te persigue cuando paras.
Por eso tu caminar continúa, portando en tu cuello sólo tu cazador de pasados, y los vuelves presente con tu sol en la nuca, para aquellos que seguimos de cerca tu abandonado caminar, arrastrando nuestros miedos con ese pasado, y sientes entre esos silencios, que el abandono es un perro que ladra sólo para ti, la sombra que te huye, los pies que duelen antes de andar, mientras la vida se diluye al fondo de las casas vacías.
Ahí, dónde todos los bienes son casi todo males, imaginas el calor entre fogones, nadie conoce el orden en ese rincón oscuro dónde antes olía a vida, donde sólo los insectos celebran su eterno verano.
Mañana es un arco iris en blanco y negro, tú encontrarás un rayo de color que regalarnos, las migajas que aún concede la vida a quienes abandonaron su miedo, por buscar la belleza del pasado.
Adaptación para las sensaciones que me transmite el poeta de lo olvidado Juan Jujiba.
OIR AUDIO DE LA ENTREVISTA (PUEDE SERVIR A MODO DE AUDIO-GUÍA DE LA EXPOSICIÓN)