Miguel Valdivieso Fernández (Granada, 1952) o simplemente Valdif, como es conocido en el mundo artístico, es uno de los artistas contemporáneos más singulares. Casi único por el material empleado (cerámica), por la técnica (esculto-pinturas), por la temática (surrealismo abstracto) y por los formatos (murales de gran tamaño).
Tiene su taller en su domicilio de Gójar donde convocó a artistas y amigos para presentarles su última creación, ‘Hieratis stargate (The light gene)’ -Puerta estelar de Hieratis. El Gen Luz- , una esculto-pintura repartida en un tríptico de 300×165 cm y casi 80 kilogramos de peso, en el que, a sus materiales habituales, le ha añadido resinas, metales, luz y sonido. Junto a él, intervinieron la polifacética pintora y escritora, Marijose Muñoz que leyó un breve texto poético compuesto para la ocasión titulado ‘Universo en tierra’ y la bailaora, Mariquilla, que recitó, con su habitual maestría, su romance verídico, ‘Allí apareció el duende’.
Antes de empezar el acto, el artista nos permitió conocer el espacio donde pacientemente crea sus obras y el horno donde adquieren su textura y color definitivo. En una de las mesas ya se van reuniendo las piezas de la obra en la que ya está trabajando en la actualidad y en las estanterías los esmaltes con los que consigue las increíbles tonalidades.
Ya en el exterior, junto a la piscina, la obra en relieve que iniciara hace dos años pero que, por otros encargos, tuvo que aparcar para volverla a retomar hace nueve meses. «Era una obra que tenía en la cabeza hasta el último detalle. Hace unos cuatro meses conocí en Internet al hipnoterapeuta de origen colombiarno, Wiliam Criado, que tiene 316 vídeos con sesiones de hipnosis a personas donde salen unas historias en las que se habla de lo mismo que mi obra», explica antes explicar cada uno de los elementos incluidos como el portal estelar, el ser luz y dos reptilianos y entidades draconianas.«Lo creé sin conocer la existencia de estos vídeos… obviamente la he canalizado de forma inconsciente», explica el artista que 2013 publicó ‘El libro regalado de la causalidad’.
Con más de 46 años de trayectoria artística a sus espaldas, Valdif «ha probado» todos los estilos desde las obras clásicas al cubismo y el surrealismo,… hasta dar con una técnica propia a base de arenas de mármol con la que hizo una serie de cuadros en relieve basados en las culturas precolombinas y más tarde en formas modernas. Un accidente de moto, a los 18 años, le llevó a permanecer durante un año y medio en un hospital lo que le permitió desarrollar su interés por el dibujo. Después se desplazaría a Madrid, donde con su nueva técnica intentó entrar en las galerías pero se encontró con un mundo acotado lo que le permitió descubrir un mercado inédito, concretamente el de las firmas de decoración para las que llegó a vender más de 600 cuadros.
Desde entonces ya se planteaba que su meta sería la cerámica que retomó hace dos décadas. Por entonces le llamaba la atención los bajorrelieves árabes creando sus propios diseños a partir de un eje central del que emana todo. Su obra ha podido contemplarse en doce ferias internacionales celebradas en territorio español donde ha conseguido muchos clientes especialmente árabes que definen su técnica como «nuevo árabe» exportando murales a bastantes países de Oriente Medio (Jordania, Irán, Siria, Líbano,…) habiendo comercializado al menos otros 600 cuadros de este tipo. Más recientemente da el salto al surrealismo abstracto. En 2019 fue galardonado con el premio internacional del arte otorgado por la Fundación Costanza.
Entre los muchos artistas y amigos que no quisieron perderse esta presentación,-además de las dos citadas, Marijose Muñoz y Mariquilla- también lo hicieron Ivonne Sánchez Barea, Alberto Atienza, José Antonio Hernández Gómez, Juan Miguel Torres, Joaquín de Alva, María José Parra, Paco Pérez, Jacinto García Rodríguez,…
