El mar, siempre el mar, por el navego, con el siempre agitado viento, con las siempre rizadas olas, por el transito hacia el ansiado puerto. Miro la orilla que se aleja, el Peñón se desfigura en la borrosa bruma enfrente la luz aclara el monte Hacho, por encima del mar, la serena tierra firme africana. Vuelve a soplar el aire salitroso y húmedo, las gaviotas inertes planean sobre la cubierta, avisan la cercanía del destino.
Suben desde lo más hondo de mí, los recuerdos en una memoria sumisa y enmudecida por los años de ausencia que me apartaron de esa orilla. Golpea mi pecho los fantasmas, percibo el mundo de voces y risas de los tiempos al otro lado del Estrecho, en otro continente, en el mismo país, en una ciudad con su propia personalidad, frontera de la vida, multirracial y cultural que se engendra a sí misma. Aquí, pasé los generosos y mejores años de la plenitud de la vida,
Con el pulso más asentado regreso a otra ciudad con otro latido, con otra modernidad. Ceuta prosigue en el tiempo, esplendida en belleza, no se desmorona. Un día cualquiera de hace 22 años partí con pañuelos de adiós, atrás quedaron los amigos, se dispersó la vida intensa de 14 años, vividos en fragmentos, compartidos: en un barrio cercano a la frontera del Tarajal, en la cumbre del monte Hacho donde el viento no descansa y el mar confluye con el horizonte de la cercana península y en el centro junto a las murallas Reales, baluarte de piedra que se alza, cierra y guarda en un abrazo protector a la ciudad.
Un centenar y medio de estudiantes del Aula Permanente de Formación Abierta (APFA)de la Universidad de Granada, desembarcan en abril en una primavera perezosa en llegar, mayores universitarios de Granada, Melilla, Guadix, Baza y Motril, reflejan su alegría con el encuentro con los compañeros de Ceuta. Nubes errantes, torbellinos de aire flamean las banderas del puerto, el cielo gris barrunta lluvia, el viento gime, el cielo de piedra y el mar de piedra nos dan la bienvenida,
El Parador de la Muralla me habla del tiempo congelado, un hotel atrapado en el tiempo donde habité sus salones y comedores. Te invita a volver al comienzo, donde el turismo y el comercio bullían en plenitud en una ciudad sin frontera, sin inmigración, sin primeras planas en los medios de comunicación., donde 4 comunidades convivían hermanadas: cristiana, musulmana, hindú y judía.
El Encuentro del Aula de Mayores y sus sedes, se hace realidad, reunión aplazada durante 2 años, hasta desvanecer las restricciones. La tarde se acelera con el primer acto oficial con las Autoridades de la Ciudad Autonómica, de la Universidad de Granada y Aula de Mayores (APFA).
Ahora huésped, ahora transeúnte, ahora alumno mayor, sentado en el salón de acto de un edificio remodelado con el aroma y solera del antiguo cuartel de ingenieros, escucho las presentaciones con un corazón agradecido, a la gratitud de la hospitalidad de los miembros políticos de la ciudad, a la riqueza del programa universitario de mayores expuesto por la dirección del Aula.
La tarde se cierra, el cielo dicta sentencia, Ceuta como en un barco barrado en medio de la borrasca, los estudiantes nos refugiamos en el interior de las bóvedas del restaurante ubicado en la muralla Real, allí los labios cantan y brindan en el coctel de bienvenida, el olor a especias y el sabor de los pinchitos morunos nos recuerda sus raíces. La música eleva su tono, los ojos brillan de satisfacción, los cuerpos danzan en la improvisada discoteca, un coro de voces canturrea las letras, fuera la noche envuelta en negro pelaje, la lluvia no cesa, el viento taladra la puerta. He pasado a la segunda parte de mi vida y no he olvidado la cólera del mar y el cielo en un temporal en la costa.
El tibio sol renace, aclara la mañana. Ávidos de normalidad, aún si desprendernos de las mascarillas, los días de encuentro universitario continúan con su programa. Por la tarde, el mundo Lorquiano se abre como fruto entre las tablas del teatro, compañeros del Seminario de Teatro de Arte dramático y escenografía del Aula (APFA) dirigida por la innovadora y creativa profesora Oren Moreno Correa. Ella, una mujer, capaz de transfigurar lo que toca, desnudar los personajes lorquianos llenos de carga dramática, coger su riqueza y convertirlos en inmensos, en las interpretaciones de los actores, estudiantes mayores aficionados. Las máscaras de la marginación que dividen a la mujer de las mujeres, a la mujer de sí misma. Personajes Lorquianos en fragmentos encerrados como conchas en tiempos convulsos y en ambiente rural. Bodas de Sangre, Yerma y la Casa de Bernarda Alba.
Las palabras me permiten compartir contigo el deleite y fascinación por esta perla del mediterráneo como es Ceuta. Aquí, cuando sopla el viento del pasado con fuerza y ya el olvido pronuncia mi nombre, siento la sensación agridulce, alegre de la seducción de los recuerdos con amigos y compañeros del ejército y amargo por los amigos que bebieron el agua de la muerte, ellos alimentaron mi cariño y amistad y aquí quedaron sus rostros en cada rincón de esta bella tierra, hombres y mujeres en sus sepulcros blanqueado junto al mar. (D.E.P.: Mínguez, “el Brivi”, Coque, Emilio, Lola, Ruiz Sumalla, J. Iraizo…)
El ferry pone rumbo a la península, la estela en el mar, una incisión el mar que me aleja, son los marcas que dibujan mi personalidad en los designios inexorables de ser nómada.
Muestro agradecimiento a cuantos han colaborado al éxito del XXIV encuentro interprovincial del Aula Permanente, en especial: a la entrañable exdirectora del APFA María del Carmen García Garnica y equipo quien lo planeó hace dos años y la pandemia se lo impidió, al esfuerzo y buen trabajo de organización del Director del Aula, Juan Antonio Maldonado y equipo de dirección, con el coordinador del APFA en Ceuta José M Heredia y muy especial a la asociación de alumnos mayores de Ceuta, AULACE por su hospitalidad, con su presidenta Estrella Pérez.
Leer más artículos de
Rafael Reche Silva, alumno del APFA
y miembro de la JD de la Asociación
de estudiantes mayores, ALUMA.
Premiado en Relatos Cortos en los concursos
de asociaciones de mayores de las Universidades
de Granada, Alcalá de Henares, Asturias y Melilla.
Vídeo de fotografías del XXIV Encuentro del APFA en Ceuta. Abril 2022
Comentarios
3 respuestas a «Rafael Reche: «Ceuta, ciudad abierta a los universitarios mayores. XXIV Encuentro del Aula»»
Rafael nos ha deleitado en esta ocasión con un magnífico artículo en el que destacaría el entrañable y poético relato que hace de las actividades del APFA, todo un elogio para sus componentes, y los recuerdos de años atrás cuando estuvo destinado en Ceuta, magníficamente expuestos. Mi más sincera enhorabuena. Te superas día a día.
Muy bien explicado él viaje de Ceuta y tus recuerdos de haber estado tanto tiempo allí él video esta muy bien yo estuve en Melilla y también tengo Buenos recuerdos me alegro que lo pasarais bien un abrazo.
Gran artículo de Rafael Reche sobre el encuentro del Aula en Ceuta, donde refleja con sabiduria y gran acierto lis actis celebradis con dicho motivo en esa maravillosa ciudad.
Gracias Rafael por los eligios hacia Oren. Un abrazo.