Un convenio entre las Fundaciones Ligalismo y La Caixa posibilitan un taller de pintura dirigido a personas mayores de la Residencia EntreÁlamos

Como otros martes, Fernando Bolívar y sus colaboradores, -maestros voluntarios de la Fundación Ligalismo y de UGR Solidaria-, Amanda Fernández, Antonio Villanueva y Juan Carlos Ballesteros, llegan en torno a las 11 de la mañana para impartir su taller de pintura en la Residencia EntreÁlamos. Mientras se colocan sus batas blancas y preparan los materiales, comienzan a llegar sus ‘alumnos’ de la residencia que van ocupando sus respectivos asientos. Al mismo tiempo el personal de la residencia les va repartiendo los lienzos que quedaron incompletos en la última sesión, junto con pinceles y pinturas. Y sin más, continúan con su tarea para la que de vez en cuando requieren el asesoramiento de los maestros.

Fernando Bolívar explica a IDEAL que está muy satisfecho con este genuino taller en el que ha cambiado a su alumnado universitario por este de la tercera edad y los orígenes del movimiento que ha bautizado con el nombre de Ligalismo con el que trata de vincular distintas manifestaciones artísticas y el efecto beneficioso de la pintura en estas personas pues pueden disfrutar y dar rienda suelta a su creatividad, al tiempo que «les sirve para diagnosticar y hacer arte-mediación e incluso para retrasar el deterioro del proceso cognitivo». El taller se inició hace un par de meses y se prolongará hasta finales de año para concluir con una exposición. Antes, durante los meses estivales se completará con unos talleres intergeneracionales aprovechando las vacaciones de los familiares de los residentes. «Este taller es posible gracias a la ayuda de la Caixa que nos financia este y otros proyectos por lo que le estamos muy agradecidos», indica Fernando antes de añadir que su intención es llevar esta experiencia a otras residencias de mayores.

Una de las ‘alumnas’, Edith María Krückhans, nacida en Alemana en 1935 y que habla español al haber vivido muchos años en Venezuela, explica que ha pintando un bonito cuadro de flores con pinceles y espátula. Muy cerca, Hipólito Lombardo, cuenta que lleva ya cinco años en la residencia y cómo el taller de pintura «es un escape maravilloso, tan es así que descansa la mente». Para terminar nos canta «un poemilla» que ha escrito en los huecos en blanco de la hoja de un periódico dedicado a la residencia y al taller que termina con la estrofa «donde famosos pintores/ pintan la vida/ de multitud de colores». También su vecina de mesa nos recita dos poesías «muy cortitas», que dedica a una de sus cuidadoras.

Por su parte, Josefa Martín reconoce que desde que acude al taller está «más animada», al tiempo que califica a ‘los maestros’ de «estupendos». La directora de la residencia desde hace 12 años, Ana Belén García Montosa, cuenta que su centro apuesta por la activación de las personas mayores para lo que cuenta con un excelente equipo de profesionales en todas las disciplinas a las que se añaden, «actividades extraordinarias» como este taller de pintura en colaboración con las Fundaciones Ligalismo y la Caixa que parte de la premisa de que «todas las personas mayores son aptas para participar en este proyecto».

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