Desde el Museo de Ciencias del Instituto Padre Suárez, el profesor José Emilio Padilla nos presenta esta semana un elemento que los alquimistas ya usaban para realizar destilaciones simples de sustancias.
Se trata de la retorta de barro cocido, usada ampliamente en los laboratorios químicos hasta comienzos del siglo XX, hasta que fue desplazada por el condensador Liebig.