Diego Medina García (Granada, 1956) es licenciado en Derecho por la UGR. Aprobó la oposición de Secretario Judicial, (hoy Letrado de la Administración de Justicia), en 1981, siendo su último destino, antes de la jubilación, el de Secretario de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Presenta su primera novela, ‘Huyendo hacia la libertad’ (Ediciones Miguel Sánchez), el miércoles, 29 de noviembre, en el Salón de Actos del Edificio de la ONCE de Granada (Plaza del Carmen) en un acto presidido por el Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Lorenzo del Río Fernández y su editor, Miguel Sánchez Peinado (18:30 h)
Diego Medina ha compaginado su actividad jurídica profesional con muy diferentes inquietudes intelectuales, ya sea en el ámbito del ajedrez, en el que compitió llegando a ser campeón de las provincias de Granada y Cádiz; o en el de la informática, creando el software de diferentes aplicaciones informáticas y siendo llamado por la Junta de Andalucía para su colaboración durante cuatro años en la implantación del sistema informático utilizado por la Administración de Justicia andaluza; o en el de la ciencia, dentro de la cual ha mantenido dedicación y esfuerzo para profundizar en los fundamentos e ideas de señalados ámbitos, como la física cuántica o la evolución biológica. Filosofía, arte, literatura e historia han constituido campos de estudio y afición que siempre le han acompañado. Ahora publica ‘Huyendo hacia la libertad’ (Ed. Miguel Sánchez) su primera incursión en el ámbito de la narrativa.
En esta novela se cuenta la historia de Javier, abogado de una importante empresa familiar. Casado y con dos hijos, socialmente se le podría considerar como un hombre de éxito. Sin embargo, él vive su vida desde joven con un sentimiento de alienación y falta de libertad en la que han sido los demás los que han ido decidiendo los pasos que ha dado en todos los ámbitos de su trayectoria personal, familiar y profesional. Un día, a sus cuarenta y cuatro años, recibe una carta de su hermana Carolina, cuatro años más joven, y con la que en su infancia y juventud tuvo una intensa complicidad. A diferencia de él, Carolina decidió vivir una vida libre de cargas familiares y sociales como periodista. La marcha de ella de Granada, la ciudad familiar, determinó que desde hace diez años no haya existido contacto entre ellos. La novela se desarrolla en el ámbito de diferentes ciudades, como Granada, Turín, Venecia y las más importantes de Marruecos.
La búsqueda del reencuentro entre los hermanos nos va situando finalmente en el marco incomparable del desierto, en el que el tiempo y la propia vida laten a un ritmo muy diferente al que ellos conocen, y en el que las palabras, los silencios y los actos de los que allí viven, expresan tanto la belleza y profundidad como la dureza y hostilidad del entorno. Las dificultades que van frustrando los deseos de Javier y Carolina, incluida la problemática del pueblo saharaui, tienen su desenlace en aventuras inesperadas en las que la libertad, la seguridad y el amor serán los ejes de un horizonte emocional que los va enfrentando a los aspecto sórdidos, pero también hermosos de la vida, y en los que ambos necesitarán encontrar toda la fuerza y vitalidad que llevan en su interior.
– ¿Por qué escribir una primera novela después de la jubilación?
– Siempre me gustó escribir y me recuerdo lector insaciable desde pequeño, pero el trabajo profesional y otras inquietudes hicieron que mi actividad literaria se desarrollara a través de la poesía o la narración corta. Sin embargo, la fuerte motivación que tuvieron en mi vida las experiencias de un viaje que realicé junto a unos amigos en el año 2009 por el norte del desierto del Sahara, mucho antes de jubilarme, me hicieron sentir la necesidad de escribir esta novela que ahora se publica.
– ¿Los personajes son de la vida real?
– No he tenido otra intención que expresar los comportamientos y sensaciones que los seres humanos normales tenemos ante las incidencias de la vida. Los protagonistas de la novela no han existido ni existen, pero presentan rasgos que no tienen nada de excepcional.
– ¿Cuál es la temática de la novela?
– Más allá de la historia que se narra, cuyo escenario principal es la búsqueda de una hermana por su hermano al entender aquel que esta necesita ayuda, la novela intenta expresar ese aparente conflicto que se da en los seres humanos entre el deseo de ser libres y la necesidad de afectividad como seres sociales. Simplificando, subyace en la historia la búsqueda del sentido de la vida por parte de los protagonistas, que se ven envueltos en situaciones que provocan emociones tan comunes e intensas como la codicia, la generosidad, el miedo, el sexo, el amor o la muerte, entre otras.
– ¿Por qué el título de “Huyendo hacia la libertad”?
– La libertad se constituye en la motivación que justifica en buena medida el comportamiento de los dos protagonistas y tanto en él como en ella constituye, si bien en momentos diferentes de sus vidas, el anhelo que les hace huir del entorno social en el que nacen y radican sus vidas para buscarla.
– ¿Por qué el desierto se constituye en el marco más importante en el que desarrollan los sucesos de la novela?
– La idea de escribirla surgió justamente en una noche muy especial en el desierto en ese viaje al que antes he hecho referencia. La búsqueda ingenua de la libertad puede llevar a situaciones insospechadas y peligrosas ya que todo ejercicio de libertad conlleva riesgos. El desierto es un marco de vida salvaje, hostil, en el que la Naturaleza se muestra en toda su grandeza, pero también con toda la dureza que exhiben los entornos no controlados por la acción del ser humano. Es un marco extraordinario para poner a prueba nuestra razón de ser en la vida.
Datos del libro:
Título: Huyendo hacia la libertad
Autor: Diego Medina García
Editorial: Ediciones Miguel Sánchez
Páginas: 498 páginas
Diseño de cubierta: Carmen Peinado
Formato: 23 x 15 cm
Precio: 22,00 €