El tiempo pasa y nosotros con él, pero Granada es eterna, hecha de tiempos, de fragmentos que nos han dejado las culturas que pasaron por la ciudad. Granada no deja de sorprendernos en su paisaje urbano.
Quiero hablaros de la fascinación de dos obras de artes arquitectónicas contemporáneas de calidad que deslumbran al mundo en Granada y que atraen a turistas de otros países para visitarlas.
En el siglo XXI la arquitectura en Granada marca su sensibilidad y movimiento, con dos obras inmensa en su belleza como son ‘El Cubo de Caja Granada’ inaugurado en el 2001 y ‘El Centro Cultural de Caja Granada’, entregado en el año 2009. 25.000 metros cúbicos de hormigón levantado cerca de Vega.
En el arquetipo de la personalidad de algunos granadinos lo catalogaron de una obra fea, igual que recientemente apuntaron el desastre de la aceptación por los ciudadanos del metro. Paradojas de negatividad que no me acostumbro a comprender del propio ADN del nativo. Hoy nadie los cuestiona.
Evidentemente es una nueva visión estética, ambas obras transmiten la geometría y la luz. Se retiene en nuestra pupila los volúmenes prismáticos.
No me pesa reconocer que el Cubo me ha deslumbrado por la elegancia artística. Siempre que pasaba por su muro periférico de hormigón, me interrogaba qué tesoro guardaría en su interior, con su entrada vetada al público al tratarse de una entidad privada.
La asociación ALUMA dentro de su programa de visitas culturales encontró la llave secreta para visitar el Cubo y el centro cultural de Caja Granada. Un grupo reducido de 20 socios han disfrutado descubriendo la gran obra maestra del Cubo, Premio Nacional de Arquitectura del arquitecto Alberto Campo Baeza, nacido en Valladolid y adoptivo de Cádiz. Donde capturó la luz para crear arte en Granada.
Situado en una zona de expansión en las afueras de la ciudad, como fondo la Sierra Nevada con sus cumbres blancas, a su costado el Parque de las Ciencias, próximo el fluir del rio Genil.
Como un dado ciclópeo inesperado en el paisaje levanta sus caras llenas de cuadradas ventanas. Construido para oficinas de una entidad bancaria, combina diversas sensibilidades como los jardines árabes, las columnas de la Catedral de Granada y la luz de Andalucía. La obra social de la caja de ahorros invirtió en el proyecto del Cubo, 25 millones de euros y 35 millones de euros en el Centro Cultural. La crisis económica a partir del 2009 impidió que se rematara el espacio con un edificio para el Teatro de la Ópera de Granada del prestigioso arquitecto japonés Kengo Kuma, con un presupuesto que sobrepasa los 50 millones de euros.
Dos emblemáticos edificios que se miran y se complementan, el Cubo con su funcionalidad para oficinas y el Centro Cultural un espacio para la música, la tecnología, la expresión y la creación contemporánea, las artes plásticas, visuales y audiovisuales.
Cuando penetramos en el interior del Cubo el impacto visual es poderoso y nos invade una sensación de entusiasmo producido por la altura, vacío y luz que penetra y se refleja en las paredes de alabastro.
El atrio central cubierto, verdadero «impluvium» de luz, recoge la luz diagonal del sur a través de los lucernarios y, reflejándola en los paramentos de alabastro, produciendo un efecto de irradiación de variados colores del alabastro, completa la iluminación de las oficinas abiertas. El emocionante espacio central está presidido por cuatro grandes columnas de 33 metros de altura y 3 metros de diámetro de las dimensiones de la Catedral de Granada.
Funcionalmente el edificio es de una gran compacidad, flexibilidad y sencillez. Llama la atención que el arquitecto Campo Baeza proyectara dos jardines árabes, uno delantero convertido en aparcamiento de coches y otro en la parte posterior donde se alinean un bosque de naranjos que no terminan de aclimatarse al espacio y clima.
Uno de los elementos más destacables del Centro Cultural Caja Granada es su arquitectura vanguardista, una referencia en las Bellas Artes. Diseñado por el mismo arquitecto que el Cubo, Alberto Campo Baeza, el edificio se configura como una gran caja horizontal de hormigón.
Destaca su impresionante Edificio Pantalla, de 42 metros de altura, por 54 metros de base, donde se proyectaba imágenes en la inmensa fachada, pero se suspendieron por la proximidad de la autovía de circunvalación de la ciudad que distraía a los conductores.
Alberga en su interior: Un museo, teatro, mediateca, el restaurante, la cafetería y la inmensa sala de exposiciones temporales (1.700 metros cuadrados) se articularon alrededor de un patio elíptico -bordeado por dos pasarelas– con un diámetro de 30 metros, similar al patio del Palacio de Carlos V de la Alhambra, al que rinde homenaje estético.
Finalizo como empecé con mi admiración a la exhibición de talento del arquitecto Campos Baeza en estas dos obras arquitectónicas, y la satisfacción personal que después de vivir 23 años en Granada he podido cumplir el sueño de visitar el Cubo.
¡ FELIZ NAVIDAD y para los estudiantes universitarios seniors que disfruten de unas buenas vacaciones!
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Rafael Reche Silva, alumno del APFA
y miembro de la JD de la Asociación
de estudiantes mayores, ALUMA.
Premiado en Relatos Cortos en los concursos
de asociaciones de mayores de las Universidades
de Granada, Alcalá de Henares, Asturias y Melilla.
Comentarios
4 respuestas a «Rafael Reche: «Cubo y Centro Cultural, la arquitectura moderna que deslumbran en Granada»»
En este magnífico artículo Rafael se atreve a comentar dos edificios pertenecientes a la arquitectura moderna de Granada, compaginando a la perfección la descripción con los conocimientos sobre arte. Llama la atención que algunas personas consideran que son monstruos en mitad de tanta belleza, pero el paso del tiempo va dejando diferente estilos arquitectónicos, y no por ello se condenaron. He ahí la belleza del escepticismo.
Enhorabuena y feliz Navidad
Gracias por tus palabras amigo Diego. El tiempo como bien dices ratifica las obras artísticas y a sus autores, genios que se adelantan a su época. Feliz Navidad.
Una vez más, te felicito por este nuevo artículo sobre “el cubo”, que no lo es, una arquitectura poco aceptada por los granadinos, creo, que por el gran desconocimiento que se tiene de ella. Mi amistad con su autor y las muchas veces que la he analizado en mis clases de Arquitectura, hacen que le tenga mucho respeto y admiración. Suelo decir que en Granada hay tres arquitectura singulares, la Alhambra, la catedral y “el cubo”, completamente diferentes y diferenciadas en el tiempo, con un denominador común: la luz.
Un fuerte abrazo.
Rafael Pérez Gómez
Gracias querido profesor y amigo Rafael, por tus sabias palabras sobre el articulo que contribuyen a fomentar la cultura en los aspecto de la arquitectura y ayuda a su interpretación artística. Feliz Navidad.