El director gerente del Parque de las Ciencias, Luis Alcalá, considera que este espacio museístico goza de un nivel internacional muy respetado en materia de desarrollo educativo
¡Quién le iba a decir a aquel niño nacido en Albentosa (Teruel) en 1959 y criado en Castellón, que un día, -el 15 de julio de 2021-, sería nombrado, por unanimidad, del Consejo Rector del Parque de las Ciencias de Granada como director gerente del mismo. Nombramiento que haría oficial, a principios de septiembre, el entonces consejero de Educación y Deporte y presidente del Consorcio, Javier Imbroda. Han pasado tres años y hemos querido conocer su balance de este periodo, así como los proyectos a corto y medio plazo para consolidar este museo como el más visitado de Andalucía. Con anterioridad, este albentosino que es licenciado que en Ciencias Geológicas por la UGR y doctor por la la Universidad complutense Madrid en la especialidad de Paleontología, dirigió durante dos décadas la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, y desarrolló su actividad en el instituto geológico y minero de España, después en el CSIC, concretamente en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid.
«En agosto de 2021 tuve el honor de incorporarme como director gerente del Consorcio Parque de las Ciencias. Cuando llegué, el Parque estaba muy enfermito pues había pasado de un cambio de sistema de gestión -en poco mas de un año llegó a tener hasta cuatro direcciones gerencias distintas- al cual no se había adaptado todavía y había pasado una pandemia por la que muchos espacios permanecían cerrados», recuerda de los difíciles momentos iniciales, Luís Alcalá. A pesar de ello, su balance de estos tres años «es muy positivo pues se ha conseguido progresar y una muestra evidente de ello es que en 2023 se alcanzó el número máximo de visitas de toda su historia, casi 900.000, así como la implementación de procedimientos, reglamentos, instrucciones y cumplimiento de normativa vigente de acuerdo al nuevo sistema gestión de la Junta». Así mismo, en este período se han materializado dos convenios internacionales de cooperación con otros museos europeos que han dado o darán lugar a exposiciones de gran calidad. De la actividad desarrollada destaca las exposiciones ‘BioInspiración. Innovar desde la naturaleza’; Inteligencia Artificial. Una exposición sobre las personas, los datos y el control’ y la que está actualmente ‘Foodprints. La huella de los alimentos’, que a su vez han generado numerosos talleres, cursos y conferencias.
Entre las futuras exposiciones en las que ya está trabajando junto a su equipo destaca tres, algunas fruto de la colaboración con el Museo de la técnica de Viena y el Museo del Trabajo de Dortmund; otra gran exposición sobre el vuelo que se inaugurará en París este mismo año y vendrá luego al parque de las ciencia, otras de gran formato sobre la transición energética relacionada con el proyecto del acelerador de partículas de Escúzar, otra sobre salud mental, a las que añade la exposición sobre la naturaleza del imperceptible que se inauguró en julio pasado.«Hay que tener en cuenta que en 2023 hubo 14 exposiciones temporales y este año va a haber del orden de 10», precisa antes de relacionar las numerosas efemérides a las que se suma cada año este espacio museístico y actividades tanto en su sede como fuera en colaboración con otras instituciones buen ejemplo de ello es la exposiciones de animales naturalizados. De este trienio destaca igualmente la creación de una nueva área de servicio como es la de divulgación científica y la participación de varios proyectos europeos y en dos grupos de investigación oficiales de la UGR, «con el objetivo de conocer el impacto de nuestras producciones en los usuarios, sean expositivas o talleres para poder evaluar el grado de satisfacción y de cumplimiento de los objetivos».
De igual forma resalta la envergadura de algunos de estos proyectos como es el de acoger la oficina española de la agencia espacial europea en materia de recursos educativos del espacio que les permite desarrollar programas como el CANSAT, que le permitió acoger la el año pasado la fase final nacional e internacional lo que permite a este Parque gozar «de un nivel internacional muy respetado en materia de desarrollo educativo». También, mientras nos muestra una matriz y un corazón, nos habla con entusiasmo del taller de plastinación, – técnica de conservación de órganos reales de seres vivos de la que disponen muy pocos museos del mundo y cuyas instalaciones se están ampliando, de los talleres estivales del que se están beneficiando 250 chicos y chicas, de la observación de las Perseídas en el Planetario, de los talleres de verano de aves rapaces y de las cinco exposiciones temporales, a las que se sumarán otra «bastante impactante que tiene que ver con el Titanic y otra vinculada al Día Internacional de la geodiversidad, etc. «El próximo año celebraremos el 30 aniversario del Parque con una espectacular exposición sobre dinosaurios que hemos coproducido junto con el Museo Arqueológico y Paleontológico de la Comunidad de Madrid, titulada ‘Cazadores de dragones’, explica Luis Alcalá.
Antes de despedirnos le interrogamos acerca de sus gustos. En cuanto a libros cita a ‘Máquinas como yo’, de Ian McEwan y la trilogía de las Fundaciones de Isaac Asimov y como película favorita, ‘Blade Runner’. Respecto a música informa que le gustan todas «desde Carmina Burana hasta Lola Índigo», y sobre colores afirma que se queda con el arcoiris, y puestos a elegir un plato. «cualquiera de cuchara como, por ejemplo, un cocido lebaniego o una olla podrida de Burgos. Si se trata de elegir una bebida se decanta por un tinto crianza y si hay que elegir un postre, la crema catalana. No duda tampoco en el lugar elegido para perderse en unas vacaciones, Dar es Salaam (Tanzania).
Ver vídeo en el que Luis Alcalá hacer balance de sus tres años de gestión:
