El escritor Andrés Neuman y su editor argentino, Pedro Solans, le acompañan en la presentación de su antología ’70 poemas’
Muchos poetas y amigos se dieron cita en la sede del Ateneo de Granada en la noche del viernes para asistir a la presentación de ’70 poemas’ [Antología, 1971-2020], de Álvaro Salvador, publicado por Corprens editora que contó con Andrés Neuman y su editor, Pedro Solans, en la mesa. Abrió el acto un emocionado Jesús Ambel, presidente del Ateneo pues Álvaro, además de poeta ha sido uno de los «refundadores del Ateneo en su tercera etapa iniciada en 2009» y que ha revitalizado la ciencia, la sociedad y la cultura de esta provincia. Le seguiría el responsable y editor de Corprens , un grupo editorial y periodístico de la República Argentina, concretamente de la provincia de Córdoba quien destacaría el incremento de su presencia en España y particularmente en Granada, «donde despacito nos vamos asentando y, por suerte, tenemos el honor de haber publicado una antología que no es cualquier antología, no solamente por el autor sino por la forma en que se trabajó en ella y en lo que significa Álvaro Salvador para la poética no solamente de España sino de Iberoamérica». Aparte de calificarle como «un poeta de envergadura» y considerarle uno de los grandes fundadores y promotores de una de las escuelas más importante de la poética de la segunda mitad del siglo XX haría referencia de la obra presentada como «un compendio bastante serio de toda su vida poética».
Por su parte, Andrés Neuman manifestaría el sentido especial de la presentación al tiempo que felicitaba la iniciativa editorial por la intensa relación entre Córdoba (Argentina) y Granada, «por lo que tiene más sentido todavía que Álvaro tenga un antología hispano-argentina o granadino-cordobesa». A continuación realizaría un breve recorrido por la fértil trayectoria poética de Álvaro Salvador comenzando antes por su labor como profesor y teórico que ha iluminado varias generaciones y de cómo esta antología «es un acto de justicia muy oportuno que de algún modo siempre fue de dos orillas». Así mismo se refirió a su primar etapa en la que estuvo en contacto con las vanguardias, el surrealismo y el experimentalismo de los 60 y 70, y de la siguiente en la que hizo especial fortuna en nuestra ciudad y en general en todo el país que como fue la de La Otra Sentimentalidad. También destacará la vocación viajera de Álvaro mezclada con su intuición americana y con su voluntad de experimentación y de los 70 poemas ( seleccionados por el, que son un guiño y homenaje a Juan de Loxa) señala «creo que nos está regalando sus primeros 50 años de poeta».
Por su parte, Álvaro reconocería estar ilusionado con esta antología por lo que supone de puerta de entrada al mercado argentino al tiempo que reconocía su vinculación con Hispanoamérica y, en concreto con este país al que emigró su abuelo y donde nació su padre, concretamente en la provincia de Mendoza y que de alguna manera le influyó a la hora de decantarse por la literatura hispanoamericana. Así mismo reconocía que en dicha antología «se podían haber incluido muchos más pero también se podían haber incluido mucho menos que eligió 70 por tratarse de «un homenaje póstumo a Juan de Loxa y a lo que significó en Granada» al tiempo que agradecía las palabras del prólogo que le ha dedicado al libro tanto Andrés Neuman,«uno de sus alumnos predilectos», como Santiago Sylvester «un poeta de mi generación argentino muy querido por mí». Por último, a modo de botón de muestra, Álvaro, leería algunos de los poemas más representativos incluidos en la antología que han sido extraídos de sus distintos poemarios entre otros de Las Cortezas del Fruto, El agua de noviembre, La condición del personaje, Ahora, todavía; La canción del outsider, Fumando con mis muertos, Diario de Firenze o Un cielo sin salida.
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