Escribir o hablar en 2025 de ‘Frankenstein’, Huxley o Isaac Asimov no resulta extraño o novedoso, nadie ignora el interés general que hay en la actualidad sobre los espectaculares avances de la ciencia, y la literatura y el cine no se han mantenido al margen de ellos, sino que ha intentado dar una respuesta a los desafíos que la ciencia ha hecho y está haciendo al hombre y a la sociedad cada vez con mayor rapidez.
Unos desafios tanto a las creencias y supuestos que parecían inamovibles de los seres humanos como a la estructura más profunda de la sociedad, de tal modo que cada vez es más difícil resistir los envites de la ciencia que están haciendo tambalear las hasta ahora más arraigadas certidumbres y convicciones de las sociedades. Una característica que tienen en común muchos de estos clásicos literarios del género de la ciencia- ficción es su visión profética y admonitoria sobre los experimentos científicos y técnicos.
La ciencia ha puesto interrogantes a enunciados hasta hace poco incuestionable, uno de los más inquietantes: ¿puede la ciencia relevar a la naturaleza en el proceso evolutivo? Está presente en la novela ‘Frankenstein o el moderno Prometeo‘ (1818) de la escritora inglesa Mary Shelley (1797-1851), obra maestra del terror gótico.
La historia en síntesis trata de Victor Frankenstein un joven obsesionado con la remota posibilidad de dar vida a cuerpos inanimados, para conseguirlo, crea a partir de restos de cadáveres un “monstruo” al que dota de vida para después aborrecerle. El relato invita a la reflexión sobre la condición humana, los límites del conocimiento y las consecuencias de traspasar las fronteras de la naturaleza. De cualquier manera el tema del “humanoide” salido del laboratorio quizás ya no esté tan lejos de hacerse realidad. La novela ha sido llevada al cine en múltiples ocasiones con más o menos fidelidad , la primera adaptación es del año 1910 y la última se estrenará a finales de este año 2025 en Netflix dirigida por Guillermo del Toro.

En esta línea pero ya en 1932 se publica la novela ‘Un mundo feliz‘ del escritor inglés Aldous Huxley (1894-1963) en la que presenta una sociedad cuyos miembros han sido cuidadosamente seleccionados por manipulación genética y se les adoctrina y anestesia para defender pasivamente un orden gobernante autoritario. Se trata de una crítica y una reflexión sobre el control del estado y la deshumanización de la tecnología. Actualmente las investigaciones en el campo de la genética están consiguiendo resultados sorprendentes y no siempre hechos públicos.
Novelas que imaginan mundos de seres transitorizados que obedecen las órdenes que se les hacen llegar a través de estímulos auditivos, o relatos que intentan denunciar el presente a través de la ficción de sociedades totalitarias regidas por las máquinas, como la novela ‘1984‘ (1949) de George Orwell (1903- 1950), en la que el autor escribe : «Despiertos o dormidos ,trabajando o comiendo, en casa o en la calle, en el baño o en la cama, no había escape, el Estado continuamente nos observaba”, frase que tiene mucho de adivinación y de aviso, ¿no está ya empezando a ocurrir aunque en otros niveles?. También fue profética la moraleja que el propio Orwell dijo que se podía extraer de su texto : “No dejes que suceda. Depende de ti”
‘1984’ es la distopía más célebre de todas la que se escribieron en la primera mitad del siglo XX.
En esta línea destaca otro maestro de la ciencia-ficción y de la fantasía el escritor estadounidense Ray Bradbury (1920- 2012), aunque él decía que sus libros eran de fantasía y que su única novela de ciencia-ficción era “Fahrenheit 451” (1953), el título se refiere a la temperatura que tiene que alcanzar el papel de los libros para que ardan, equivale a 233 grados centígrados.

Describe una sociedad totalitaria en la que cualquier libro está sujeto a la quema con el propósito de hacer desaparecer el pensamiento crítico y conseguir el adormecimiento de las masas. Es una crítica social y una advertencia ante el rumbo que estaba tomando la sociedad. En palabras del propio autor: “Vivimos en un mundo que nos absorbe con sus normas, con sus reglas y con una burocracia que no sirve para nada. Hay que tener mucho cuidado con los intelectuales y los psicólogos que te intentan decir lo que tienes que leer y lo que no”.
El prestigioso cineasta francés François Truffaut ( 1932- 1984) llevó la novela al cine en 1966. Ray Bradbury tuvo una gran influencia en otros muchos escritores , en España la serie de televisión ‘Historias para no dormir‘ (1964) de Narciso Ibáñez Serrador adaptó bastantes relatos del escritor americano.
Autor prolífico, más adelante hablaremos de otra de sus renombradas obras ‘Crónicas marcianas‘ ( 1950), en vida recibió múltiples premios y reconocimientos, hasta un asteroide lleva su nombre y un cráter de la luna fue llamado “Cráter Dandelión” en honor a su libro ‘Dandelión Wine’ (El vino del estío).
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