El Instituto Hidrográfico de la Marina (Ministerio de Defensa) es el responsable en España de publicar el boletín “Aviso a los navegantes”, que, entre sus objetivos, contempla “(…) actualizar cartas náuticas, derroteros, lista de faros, lista de radioayudas a la navegación…” (es.wikipedia.org).
Seguro que ya adivináis el derrotero de esta reflexión… La cuestión que me planteo –y os planteo– gira en torno a la necesidad (¿perentoria?) de contar con una nueva publicación titulada “Avisos a la ciudadanía” –tengo en mente algunos nombres de independientes que podrían asumir la “carga” de ser “responsable de contenidos”– y que se ocuparía, entre otros temas, de revelar mil y una cuestiones sobre la cuestionable derrota náutica y sus peligros en la que, socialmente nos están mareando.
Entiendo que, en un mundo cada vez más complejo y cambiante, la información confiable y oportuna se ha convertido en una herramienta fundamental para la participación activa y consciente. Sin embargo, la proliferación de noticias sesgadas, desinformación y la falta de transparencia en diversos ámbitos sociales y políticos dificultan que podamos tomar decisiones informadas y defender nuestros derechos… Desde la transparencia en la gestión pública, hasta la protección del medio ambiente, pasando por la defensa de los derechos sociales y laborales, todos estos temas requieren de una comunicación clara y accesible que permita a cada individuo entender su papel y su impacto en la sociedad.
Al respecto, dejadme recordar que el objetivo de nuestros dirigentes debería centrarse en promover una ciudadanía informada, participativa y responsable, capaz de reconocer los riesgos y actuar con conocimiento y compromiso. Porque solo a través de la información veraz y la reflexión podemos construir un camino hacia una sociedad más justa, democrática y solidaria.
Al fin y al cabo, singlar a destino seguro no sólo implica desplazarse por el agua, sino también vigilar los vastos océanos de la información y de las ideas.





