Guerra Israel-Palestina: conocer para entender

El detonante de la guerra entre Israel y Palestina, entre Israel y Hamas, que ya se ha extendido a otros países árabes, fue el lanzamiento de misiles por parte de esta organización terrorista hacia suelo israelí el 7 de octubre de 2023. Desde entonces el conflicto bélico continua y por unos derroteros cada vez más crueles: ¡sólo hay que ver lo que Benjamín Netanyahu está haciendo en la Franja de Gaza! La prensa, y bajo su función de informar, nos narra los acontecimientos más relevantes del conflicto aludiendo a términos que encierran conceptos. La finalidad de este artículo no es otra que la de definir dichos términos, en la convicción de que, al conocerlos, cualquier referencia a esta guerra se comprenderá mejor. Bajo un criterio cronológico, he seleccionado aquéllos que a mi entender devienen más significativos.

Origen de Israel. La Biblia es una fuente relevante para conocer la historia de los judíos. Paul Johnson, en “La historia de los judíos” (2023), dice que “La Biblia no es una obra de razón, es una obra de historia” (pág. 37); de ahí que cite el origen de Israel desde el Génesis: “El Señor dijo a Abrán: sal de tu tierra, de tu patria y de la casa de tu padre hacia la tierra que te mostraré; haré de ti una gran nación, te bendeciré, haré famoso tu nombre y serás una bendición” (12. 1, 2). Así lo hizo llegando hasta Canaán para luego atravesar el país hasta Siquén, Betel y el Negueb. La tierra de la que salió era Ur, la actual Irak.

Hebreo, israelita, israelí. Hebreo era el pueblo semítico procedente de Mesopotamia que conquistó y habitó Canaán: los hebreos eran los ancestros de los judíos. Israelita se refiere a todo habitante del antiguo Reino de Israel mientras que israelí es el gentilicio del actual Estado de Israel.

Semita. Hace alusión a Sem, el hijo de Noé, a su descendencia y, por extensión, a los judíos. Antisimetismo es el rechazo, odio e incluso el aniquilamiento de este pueblo.

Judío. Toda persona descendiente de Judá, uno de los hijos de Jacob, y originario del territorio que a éste le correspondió. La condición judía se transmitía por vía materna o mediante un acto religioso.

Judaísmo. Una de las religiones más antiguas de la Historia y la primera que se erigió claramente como monoteísta. Los judíos son seguidores de Yahvé quien, según la Biblia, transmitió su legado a los hebreos a través de Moisés y los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí.

Sionismo. Es un concepto que designa la idea de que los judíos tuvieran su Estado en Palestina. Nació del impulso de una búsqueda de seguridad dentro de una sociedad que se negaba a integrar a los judíos como iguales y que ocasionalmente los perseguía. El sionismo se transformó en un proyecto político a través de las ideas de Leo Pinsker en su obra “Autoemancipación”, y muy especialmente, de Theodor Herzl con su libro “El Estado judío”.

Torá. Libro que contiene el cuerpo de la Ley y el saber de los judíos. Se corresponde con los cinco libros que forman el Pentateuco: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. La Torá fue escrita por Moisés guiado por inspiración divina.
Diáspora. En el año 66 d.C. los judíos se sublevaron contra la dominación romana. Vencieron los romanos, y entre otras consecuencias, conllevó la destrucción del Segundo Templo de Jerusalén en el año 70 d.C.: de ello queda el “Muro de las Lamentaciones”. Como consecuencia, los judíos se exiliaron por Europa y Oriente Medio: esto es la Diáspora.
Declaración de Balfour. Por esta Declaración (2 de noviembre de 1917) Gran Bretaña fue la primera potencia que apoyó la constitución de un Estado judío en Palestina apoyado por Rusia y Estados Unidos. Su presidente, John Adams, declaró: “Deseo ver a los judíos otra vez en Judea como una nación independiente”. Su nombre se debe a Arthur James Balfour, ministro británico de Relaciones Exteriores.
Resolución 181 (II) de 29 de noviembre de 1947 de la ONU. Naciones Unidas puso fin al Mandato Británico sobre Palestina mediante esta Resolución: 33 votos a favor, 13 en contra y 10 abstenciones. Por ésta, el 15 de mayo de 1948, se decidió dividir Palestina en dos Estados (uno árabe y otro judío) con un régimen especial para Jerusalén.
Holocausto. El Holocausto fue la persecución y el asesinato sistemático de, aproximadamente, seis millones de judíos: fue organizado y auspiciado por el régimen nazi. Comenzó en 1933 cuando Adolf Hitler llegó al poder en Alemania y terminó en 1945 al finalizar la Segunda Guerra Mundial.
Estado de Israel. El 14 de mayo de 1948, David Ben Gurión leyó la Declaración de Independencia en el Museo de Tel-Aviv: “En virtud de nuestro derecho nacional e intrínseco, y apoyados en la fuerza de la Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas, declaramos en este acto la creación de un Estado judío en Palestina que se denominará Estado de Israel”.
Guerra de la Independencia. A las pocas horas de este acontecimiento, el nuevo Estado fue invadido por los países árabes colindantes comenzando así la primera guerra árabe-israelí, o Guerra de la Independencia.
Genocidio. La Comisión establecida por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha afirmado: “Los acontecimientos en Gaza desde el 7 de octubre de 2023 no se han producido de forma aislada. Fueron precedidos por décadas de ocupación ilegal y represión bajo una ideología que exigía la expulsión de la población palestina de sus tierras y su reemplazo. Al matar, causar lesiones graves a la integridad física o mental, someter deliberadamente a condiciones de vida que hayan de acarrear la destrucción total o parcial de los palestinos, e imponer medidas destinadas a impedir la natalidad, las autoridades y las fuerzas israelíes cometieron cuatro de los cinco actos genocidas definidos en la “Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio” (1948). También Navi Pillay (presidenta de esta Comisión) ha manifestado: “Es evidente que existe la intención de destruir a los palestinos de Gaza mediante actos que cumplen los criterios establecidos en la Convención”.
Dos Estados. Para Ilian Pappé “La realidad de la colonización actual de la mayor parte de Cisjordania por Israel hace improbable cualquier solución de dos Estados […]. En el futuro, lo único que podría cambiar es que las Naciones Unidas admitan a Palestina como miembro de pleno derecho”: “Los diez mitos de Israel” (2019, págs. 187-188). En este línea, Netanyahu declaró el pasado 26 de septiembre en la ONU: “Permitir la crecieron de un Estado palestino contiguo a Israel sería como darle un Estado a Al Qaeda en EE.UU. después del 11-S, y eso no lo vamos a hacer”.