El pasado 20 de noviembre, y coincidiendo con el aniversario de la muerte de Buenaventura Durruti, un grupo de profesores y profesoras de distintas áreas didácticas del IES Montes Orientales de Iznalloz, visitamos el lugar de memoria del barranco de Víznar. Fuimos recibidos, como siempre exquisitamente, por Fran Carrión, miembro del equipo de la Universidad de Granada que lleva a cabo, desde hace ya diversas campañas, labores de localización, excavación y exhumación de fosas y víctimas ejecutadas por el franquismo en este paraje.
Después de varias visitas en los últimos años con alumnado del centro de diversos niveles educativos (desde 1º de ESO hasta 2º de bachillerato), la última unos días antes, el 17 de noviembre, esta vez pensamos que ya tocaba realizar esta visita a pie de fosa con el profesorado, sin duda el actor clave a la hora de transmitir a los alumnos y alumnas, nuestros futuros ciudadanos y ciudadanas, el compromiso con los valores esenciales que establece nuestra ley educativa en cuanto a ciudadanía, democracia, empatía y defensa y compromiso con los derechos humanos y libertades más básicos, que tan en cuestión se están poniendo en los últimos tiempos por los discursos reaccionarios y revisionistas de carácter neofascista y de extrema derecha.
La propuesta tuvo una gran acogida, sumándose profesorado de distintas materias de nuestro centro, tanto de secundaria como de bachillerato y de ciclos formativos. Sin olvidar a sus familiares, que también asistieron a las explicaciones in situ de Fran Carrión y de diversos familiares de víctimas.
Sin duda fue una tarde tan emotiva y reflexiva como necesaria, ya que nuestros compañeros y compañeras pudieron ver cara a cara, y a pie de fosa, a la Historia y al fascismo, siendo plenamente conscientes de la dimensión de la barbarie que fue el genocidio planificado, sistemático e institucionalizado que llevaron a cabo las fuerzas reaccionarias, no contra la II República, sino contra toda persona que se posicionara mínimamente en defensa de la libertad, la igualdad, los derechos básicos, la justicia social y la cultura humanista e ilustrada como motor de cambio y transformación personal y social.
Toda una lección magistral, no sólo de parte del equipo de la Universidad de Granada y los familiares de víctimas (de nuevo muchísimas gracias), sino igualmente de parte de nuestros compañeros y compañeras docentes, demostrando un compromiso y una sensibilidad hacia la verdad, la justicia y los valores democráticos, éticos y morales más básicos que deberían de ser inherentes a nuestra profesión, siendo eso, una profesión comprometida, no un trabajo.
Por eso quiero aprovechar la ocasión para agradecer a mis compañeras y compañeros el compromiso e interés mostrado, más en estos tiempos en que se niega (por acción u omisión) la formación al profesorado en materia de memoria democrática. Porque sabed que, como decía Miguel Hernández, llevamos mucha verdad metida dentro del corazón, sangrando por la boca, y os vencerá la férrea juventud de la vida, pues para tanta fuerza tanta maldad es poca. A pesar de las trabas, omisiones, desidias y coacciones que puedan darse (y que se están dando ya en muchos centros educativos del Estado, y refiriendo al también poeta y periodista castellonense Vicent Andrés Estellés, hi haurà un dia que no podrem més i llavors ho podrem tot. Eso sí, no esperemos a “no poder más”.
En sucesivas entregas se reproducirán las sensaciones, impresiones y reflexiones de algunos compañeros y compañeras que asistieron a la visita, y que han encontrado un hueco entre tanta burocracia administrativa con que se nos anquilosa y entierra por parte de la administración educativa, para expresar lo que vivieron y sintieron.
José María García-Consuegra Flores
Profesor de Geografía e Historia
IES Montes Orientales (Iznalloz, Granada)
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