Esas medidas están bajo el paraguas de cinco grandes desafíos. Son: Mejorar los logros educativos del alumnado, conseguir un mayor respaldo y reconocimiento a la labor del profesorado, impulsar el apoyo y la participación de las familias, contribuir al cambio hacia la economía sostenible e implicar a la sociedad en los desafíos educativos.
La incorporación de nuevos profesores a la enseñanza pública hasta superar los 100.000 antes de que finalice la legislatura, la aprobación del II Plan Andaluz de Formación Profesional, la modernización de la Administración educativa, la tutoría electrónica o la aprobación de una normativa específica de apoyo a la lectura son algunas de las 80 medidas que se pondrán en marcha. La Ley de Educación de Andalucía (LEA) y su memoria económica serán el marco legal que permitirá su desarrollo.
La mitad de las medidas recogidas en ‘Esfuerza’ están centradas en universalizar el éxito escolar, aumentando las tasas de titulados y reduciendo el nivel de abandono y fracaso escolar. Hasta cuarenta iniciativas, como el incremento de plazas en el primer ciclo de Infantil (de 0 a 3 años), el seguimiento del alumnado de Primaria con más dificultades en comunicación lingüística y razonamiento matemático, el refuerzo en horario de tarde o los desdobles de grupos en las materias instrumentales de la ESO y la extensión de los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI) se centran en este primer desafío, recogido en un documento que se puede consultar en la página web de la Consejería de Educación de la Junta.
Asimismo, se hace referencia en el documento a que se prestará mayor atención a los mecanismos de promoción dentro del sistema educativo e introducirá mejoras en la autonomía de los centros docentes y en los sistemas de inspección; se disminuirá la ratio en grupos que presentan especial problemática socioeducativa; con más desdobles de grupos en las materias instrumentales de la educación Secundaria obligatoria; con currículos más abiertos que favorezcan la obtención de la titulación en la educación Secundaria obligatoria; extendiendo programas de cualificación profesional inicial para posibilitar la obtención del título de graduado en educación Secundaria obligatoria; y mejorando la articulación de los módulos voluntarios de los programas de cualificación profesional inicial con los de diversificación curricular y potenciando horarios y formas de organización flexibles que permitan aprovechar mejor los recursos disponibles.
En la medida número diez se recoge: «Integrando los contenidos de las diferentes áreas o materias, con objeto de enfatizar más los resultados de aprendizaje en términos de competencias que de transmisión de contenidos». Asimismo, otra medida será reconociendo y facilitando las funciones de los tutores desde las primeras etapas escolares y su vinculación y trabajo con las familias.
En los dos últimos puntos de este desafío, el 39 hace referencia a que se publicará periódicamente conclusiones de interés general, como los resultados de las pruebas censales de evaluación diagnóstica en competencias básicas de unos 200.000 alumnos y alumnas de 4º de Primaria y segundo de Secundaria Obligatoria cada curso escolar, informes sobre convivencia, líneas de mejora, resultados andaluces contemplados en evaluaciones nacionales o internacionales. En la número cuarenta la referencia es a que se desarrollará reforzando el papel de la inspección educativa con líneas de trabajo que contribuyan a la evaluación y supervisión del sistema educativo y a la mejora de los rendimientos escolares.
Para el profesorado también habrá medidas y reconocimiento. Desde el máximo respeto y consideración a su papel en la sociedad; 41: Reconociendo y apoyando la dimensión magistral y académica de la autoridad del profesorado, su protección jurídica y psicológica, la presunción de legitimidad en su ejercicio profesional y la reprobación de las conductas contrarias a su dignidad; 42: Aprobando y difundiendo la ‘Carta de Derechos del Profesorado de Andalucía’, así como campañas de sensibilización hacia la importancia de su labor; 43: Desburocratizando la actividad general del profesorado y simplificando los procedimientos administrativos relacionados con la docencia, para favorecer su plena dedicación a la enseñanza.
La Junta insistirá, además, en los programas dirigidos a la permanencia en el sistema educativo tras la enseñanza obligatoria con el objetivo de incrementar el número de jóvenes con titulaciones superiores. De esta forma, se continuarán programas como la Beca 6000 o el transporte escolar gratuito. Además, se potenciarán los cursos de preparación a las pruebas de acceso a los ciclos formativos de FP y las pruebas libres para la obtención del título de graduado en ESO, FP o Bachillerato, entre otras.
Desde la Administración educativa se impulsará la atención al alumnado con altas capacidades intelectuales, se ampliarán los planes de modernización, como la Escuela TIC 2.0 y los centros bilingües, y se continuará analizando y mejorando el sistema educativo a través de la Agencia Andaluza de Evaluación Educativa, como se ha indicado anteriormente.
El profesorado, como se ha indicado, es y será la figura central en el proceso de enseñanza-aprendizaje, y para conseguir el mayor reconocimiento a su labor, Educación aprobará y difundirá la Carta de Derechos del Profesorado, a la que acompañará una campaña de sensibilización dirigida a apoyar la dimensión magistral y académica de la autoridad de los docentes.
Además, para promover su plena dedicación a la docencia se eliminarán tareas burocráticas y se simplificarán los procedimientos administrativos relacionados con su labor. También se aprobará un nuevo procedimiento de gestión de ausencias y sustituciones, con más presupuesto y que garantice mayor flexibilidad, agilidad y seguimiento desde los propios centros educativos, que contarán con mayor autonomía para adaptarse a su entorno. En otras de las medidas se tiene como referencia la prestación de servicios complementarios, que seguirá siendo una de las apuestas de la Consejería de Educación con el fin de avanzar en la conciliación de los horarios escolar y laboral de las familias andaluzas. Se ampliará así el número de centros acogidos al Plan de Apertura con aula matinal, comedor y actividades extraescolares. También se mantendrán las actuales líneas de apoyo a las familias, como los libros de texto gratuito durante toda la enseñanza obligatoria, los ordenadores y las bonificaciones en los servicios complementarios.
Para facilitar la participación de las familias, se aprobará una nueva normativa que posibilite la suscripción de compromisos educativos y de convivencia que permita el seguimiento directo del proceso educativo de los niños con horarios de atención más flexibles e implantando la tutoría electrónica.
Del mismo modo, para favorecer la implicación del conjunto de la sociedad en los desafíos educativos, se potenciarán los Consejos Escolares y las Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado, así como la colaboración con los ayuntamientos y también con los medios de comunicación.
Para contribuir desde la educación a la economía sostenible se seguirá reforzando la oferta parcial de ciclos formativos para trabajadores o desempleados, las convocatorias anuales para la obtención del graduado en ESO, a la que desde este mismo curso se sumará la del Bachillerato, o la enseñanza en las modalidades semipresencial o a distancia a través de plataformas virtuales en internet.