En la mañana del miércoles, 20 de febrero, se inauguraba en la Escuela de Arte de Granada (EAG) la exposición ‘Superpuestos, super puestos’ de la antigua alumna María del Carmen Marín.
Esta muestra se enmarca en la propuesta de la Escuela de Arte de Granada EAG de «traer» alumnos y alumnas que recibieron estudios en el Centro, ofrecerles los espacios de la EAG para mostrar su trayectoria externa, y trasladar sus logros a los alumnos y alumnas actuales.
La exposición «Superpuestos, super puestos», compuesta por 50 cuadros, es el resultado de superponer los materiales empleados de una manera muy meditada, no al azar. Para su creación se ha optado por la técnica mixta, utilizando diversos materiales: papel, cartón, madera, metal y esmalte al fuego sobre metal (acero y cobre). «Al combinarlos, colocarlos, ponerlos compartiendo espacio y tiempo, se busca la armonía en la composición jugando con los colores, los volúmenes y las texturas».
Los motivos representados están inspirados en la Naturaleza que aparece, algunas veces, de una manera más abstracta y, en otras, de manera más figurativa; por ejemplo, en aquellos cuadros en los que podemos identificar rostros, animales y paisajes, etc.
María del Carmen Marín García (Almería, 1968) es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Granada en la especialidad de Escultura. Cursó estudios en la Escuela de Arte de Almería y en la EAG, donde se graduó en Artes Aplicadas en la especialidad de Cerámica Artística, así como en el Ciclo Formativo de Grado Superior de Arte Textil y Ciclo Formativo de Grado Medio de Esmaltado sobre Metales.
Ha obtenido el Premio Extraordinario de Artes Plásticas y Diseño, de la Familia Profesional de Textiles Artísticos, otorgado por la Junta de Andalucía en 2014, con el proyecto “Finito infinito”. En el año 2016 recibió el Premio de la Fundación «Robles Pozo» en el Certamen «Imágenes por la Igualdad» con la obra “¿Dónde amar no es delito?”.
María del Carmen Marín agradece a la EAG la oportunidad de exponer en las paredes del centro donde ha aprendido de sus profesores y compañeros. También a Juan, guitarrero, por las maderas que le facilita, así como a su familia y amigos pro su apoyo incondicional.