El veterinario y escritor, José Luis León Padial (1966), tiene escritas cuatro novelas: La espuma del champán, Petro para todo y los perdedores de la vida‘, Las reglas del juego y Seis números rojos. Esta última, con prólogo de Salvador Fernández Vivancos, la escribió hace 18 años aunque ha sido ahora cuando ha podido publicarla con Editorial SG.
Cuenta con un buen arranque: «Siempre supe que mi vida dará un giro en cualquier momento pero lo que hoy no esperaba era pasar, en cuestión de minutos, de padre de familia respetable a enemigo público número uno de mi ciudad. Y eso es lo que estaba a punto de suceder». También con un buen y vertiginoso final que será del agrado de los lectores. ¿En medio? Doscientas páginas de amena lectura, salpicadas de comparaciones ingeniosas, retruécanos, magistral uso de la hipérbole y rocambolescas situaciones, cual comedia berlanganiana, que hará soltar alguna que otra sonrisa, e incluso tal vez carcajadas.
Todo ello, en una novela con tintes policíacos, cuyo escenario discurre es el barrio del Realejo (comisaria de la plaza de los Campos, entorno de Santo Domingo, plaza Fortuny, cuesta del Chapiz y aledaños), donde Luis del Castillo, farmacéutico, casado y con dos niñas pequeñas, se las verá con la camorra granadina en su intento por demostrar su inocencia. También el lugar donde conocerá a personajes entrañables como el joven Quini y su amigo Nómedes que se crecen en cada página.
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