Este alfacareño que ha sido funcionario, empresario y asesor comercial indica que su primera novela ha sido “una buena experiencia a la que le debe que la gente me conozca un poco”. Para refrendar esta afirmación cuenta la anécdota que le ocurrió no hace mucho tiempo cuando una señora se le abrazó al tiempo que le expresó sus felicitaciones por su obra.
También admite que, afortunadamente, las polémicas que esperaba al incluir relatos acaecidos se han diluido y “no ha llegado a más”. Ahora cuando su segundo volumen es una realidad tangible se muestra de nuevo orgulloso y esperanzado con que pueda llegar a mucha gente. “El libro en sí tiene unos pasajes muy fuertes, como la vida misma”, nos cuenta a modo de inquietante preámbulo, tras lo que nos aclara que aunque sea un trilogía los libros se pueden leer por separado ya que los que les une “el hecho de que estén protagonizados por los mismos personajes”.
Creyente
Para alguien que admite tener “una acendrada fe cristiana” es inevitable que aparezcan pinceladas religiosas. Sin embargo, el autor justifica que «no digo nada que hoy en día no se haga». En cuanto a esta segunda parte cuenta que asistiremos a la situaciones de una mujer de 50 años que tiene que descifrar ciertos enigmas para lo que necesita encontrar un hombre de una gran urbe para llevar a cabo entre ambos esa misión. “Sin embargo dentro de esa lucha se enamora de otro hombre lo que le provoca una gran lucha interior”, aclara.
En cuanto a sus fuentes de inspiración Martínez reconoce que juega con la fe pues insiste “soy un escritor con fe, practicante. Ello me lleva a pensar que quien lea mi libro tendrá un antes y un después” indica este autor que reconoce que cuando estaba escribiendo los últimos capítulos “estaba esta escribiendo los últimos capítulos al mismo tiempo estaba llorando”. También que le gusta tener al lector intrigado para lo que mezcla la vida de dos o tres personajes. En esta obra espera poder demostrar de nuevo la necesidad imperiosa de expresar lo que lleva dentro. “Para mí el escribir es tan necesario como el respirar”, pues no en vano todos los días tiene que dedicar un mínimo de dos horas a la lectura y escritura. Tras la presentación en Alfacar, espera que las gestiones de su amigo Antonio Murcia le permita llevar a cabo en en Granada. Mientras da los últimos retoques al tercer volumen que llevará por título “El detective de la novela planta”.
Sinopsis: Villa Esperanza es una zona residencial rodeada por fuertes murallas. Los inquilinos de este fantástico paraje son temporales, pues casi todos terminan marchándose de allí. El centro de la Villa lo ocupa un edificio inmenso de diez plantas, a las que son asignados los recién llegados de acuerdo a la actitud que mantuvieron en vida. La sosegada vida de Martín, antiguo empleado de correos, se ve alterada por la aparición de la residente Florina, una mujer tan misteriosa como escurridiza, llamada a cambiar el curso de su existencia. Si obtiene éxito, Florina logrará el sueño dorado de todos los mortales: el ascenso automático a la décima planta. ¿Es posible devolver la paz eterna a quien vaga por los escenarios de su muerte? ¿Se puede recobrar la pasión por la vida más allá del tiempo marcado en el calendario de cada persona? ¿Es cierto que el amor exime de todas sus iniquidades al culpable sin importar cuáles fueron sus crímenes? ¿Existe una esperanza verdadera para quienes reniegan de Dios y de la bondad como llaves maestras de todas las cerraduras? Martín se hace estas preguntas mientras protagoniza la más extraordinaria de las aventuras. Todo empezó en La Casa de los Baños de Alfacar (Granada) y se relaciona con sucesos verídicos ocurridos en plena guerra civil española, cuyas consecuencias que se extienden hasta nuestros días… |
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