Así, para recordar y conmemorar el primer aniversario del nacimiento de Francisco Ayala tras su muerte, la Fundación que lleva su nombre organizó, en colaboración con la Delegación de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, una suelta de globos en diez centros de la provincia. Los maestros y los alumnos y alumnas se encargaron de poner la emoción.
Los cincuenta y cinco alumnos del colegio ‘Francisco Ayala’ de Fátima -municipio de Castril-, por ejemplo, celebraron una jornada de convivencia junto a sus padres. No faltó el cumpleaños feliz al autor de ‘Otro pájaro azul’, según explicó el director del colegio, Ginés Sánchez. Éste es el título del libro que ha repartido la Fundación, en edición de bolsillo, a los diferentes centros y que han trabajado y leído durante estos días los alumnos más mayores de colegios como el ‘Andrés Segovia’, según explicó el director del centro, Luis Eduardo Rodríguez.
La obra contiene: La feria de pájaros; El gallo de la pasión; Entre palomas y ratas; Los gorriones; Las alimañas; Una postal puertorriqueña; A las puertas del Edén; Otro pájaro azul. Lo editó en 2006 la Diputación Provincial y consta de 32 páginas.
En el colegio ‘Genil’, Antonio Tovar, director, detalla que estos últimos días han estado repasando esta obra y también el resto de la biografía del autor granadino. Por su parte, en el colegio ‘Francisco Ayala’ de Cúllar hicieron, según detalló la directora, Matilde Lupiáñez, una lectura expositiva los más mayores para los más pequeños. Los de los primeros cursos han hecho trabajos de ‘sopa de letras’ con las obras de Ayala. Esas manualidades se expondrán en el centro hasta Semana Santa. En el centro ‘Parque de las Infantas’ no se han hecho murales, pero sí lecturas de la obra ‘Otro pájaro azul’, según explica el director, Blas López.
Las actividades han sido variadas. En el colegio ‘Francisco Ayala’ de Orgíjares los escolares han trabajado este tema escribiendo una carta al autor de obras como ‘Un caballero granadino y otros relatos’. Todo el centro ha participado y han sido varios los fragmentos de ‘Otro pájaro azul’ los que se leyeron, según la directora del CEIP ‘Francisco Ayala’ de Ogíjares, Josefa Hernández.
En esta conmemoración de nacimiento, de cumpleaños en definitiva, no faltaron los globos. En los mismos se estampó una silueta del escritor, obra del dibujante Paco Puga. Cada uno de los diez centros soltó 104 globos, en recuerdo de la edad que Ayala habría cumplido este 16 de marzo.
El acto central tuvo lugar en el instituto de Enseñanza Secundaria ‘Francisco Ayala’ de Granada, donde durante estos días se exhibe la exposición ‘De mis pasos en la tierra’, producida por el Centro Andaluz de las Letras con motivo del centenario de Francisco Ayala en 2006.
Además del instituto ‘Francisco Ayala’ también han participado en este homenaje el instituto Padre Suárez y los centros escolares ya mencionados como Genil, Andrés Segovia, Parque de las Infantas y Profesor Tierno Galván, todos ellos de la capital granadina, así como los colegios que llevan el nombre de Francisco Ayala en las localidades de Ogíjares, Cúllar Vega, Iznalloz y Fátima. En todos los centros se han leído fragmentos del mismo libro y se ha repasado la obra y vida de este paisano ilustre.
Francisco Ayala aprendió sus primeras letras en el colegio de Niñas Nobles; fue alumno más tarde de los colegios Calderón y de los Padres Escolapios, hasta ingresar en el Instituto General y Técnico (hoy Padre Suárez), donde cursó el Bachillerato, que finalizó en el Instituto San Isidro de Madrid, ciudad a la que se había trasladado con su familia en 1922. En este mismo suplemento se dan más detalles en reportajes -páginas 7 y 8- sobre su paso por estos centros educativos, su expediente y sus inquietudes.
Desde la Fundación Francisco Ayala, destacan como el autor granadino «por su curiosidad ante el mundo, por su atención al presente y por su afán de conocimiento, Francisco Ayala convirtió su vida en un permanente aprendizaje, cuyos frutos tuvo ocasión de trasmitir a sus numerosos lectores y a las sucesivas promociones de discípulos que lo disfrutaron como profesor de Sociología y de Literatura Española».