La puntuación en inglés suele ser una de las piedras en el camino para los estudiantes hispanohablantes. Aunque las reglas básicas se parezcan, las diferencias sutiles provocan errores constantes en redacciones, exámenes o correos. Para entender mejor el tema, es útil repasar primero una guía completa de los signos de puntuación en inglés y después centrarse en los fallos más habituales.
Por qué los hispanohablantes fallan en la puntuación inglesa
El español y el inglés no funcionan igual en lo que respecta a pausas, énfasis y estilo escrito. En español, por ejemplo, se usan dobles signos (¿?, ¡!) y las comas tienden a marcar respiraciones más naturales. En inglés, la norma es más rígida y no admite licencias que en la lengua de partida resultan normales.
Errores frecuentes que debes evitar
El uso de la coma
Uno de los fallos más comunes es trasladar la coma española al inglés. Muchos estudiantes la colocan antes de “and” en listas cortas, cuando en inglés es opcional y se conoce como Oxford comma. También es habitual abusar de comas en oraciones largas, generando textos difíciles de leer.
Los signos de interrogación y exclamación
En inglés nunca se coloca un signo de apertura. Es incorrecto escribir “¿How are you?” o “¡Congratulations!”. El signo solo va al final de la oración. Parece un detalle menor, pero resta naturalidad al texto y puede distraer al lector nativo.
El punto y coma y las comillas
El punto y coma suele confundirse con dos puntos. En inglés se utiliza para unir dos frases independientes relacionadas, no para introducir listas. Las comillas, además, cambian según la variedad: en EE. UU. predominan las dobles (“ ”), mientras que en Reino Unido es común usar las simples (‘ ’).
Estrategias prácticas para mejorar
Para evitar estos errores conviene leer en inglés con atención, fijándose en cómo usan la puntuación los autores nativos. También ayuda escribir pequeños textos y revisarlos comparando con fuentes fiables. Herramientas digitales de corrección y el acompañamiento de academias como Kelington pueden marcar la diferencia al entrenar un uso correcto y natural.
Conclusión
Dominar la puntuación inglesa no consiste en memorizar largas listas de reglas, sino en practicar con constancia y evitar los fallos más comunes. Con pequeñas correcciones, la escritura en inglés gana claridad y profesionalidad.





