El mismo Jesús García que recibió del gerente del Hospital, Manuel Bayona, una placa y un diploma de agradecimiento «por su participación en la exposición de pintura y por su aportación a los fondos culturales del Hospital Universitario» nos dio unas pinceladas, nunca mejor dicho, de esta singular exposición de la que señala que «en principio iba a ofrecer una muestra de una temática más concreta, pero al final me ha parecido buena idea traer diversos temas realizados con técnicas diferentes que permiten mostrar diversas etapas que he tenido. Por eso he traído paisajes, retratos, marinas,… de ahí el título ‘De par en par’ dando a entender que abro todo mi trabajo y mi corazón en esta exposición». Y así es, pues en la primera sala se ofrecen varias obras realizadas con técnica mixta con collages en la que se ven escenas principalmente de personas ancianas en animada tertulia, aunque también hay varias protagonizadas por niños. Con ellas el artista pretende que «se mantenga un diálogo con el espectador merced al entorno difuso que rodea a las personas y a los mensajes semiocultos procedentes de recortes de prensa».
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Si en una de ellas se ve a tres abuelos hablando de la crisis enfrente son tres abuelas con un portátil cuya obra ha titulado ‘Se acabó el ganchillo’ junto a otra en la que precisamente se ve a otras tres realizando esta tarea. Un niño con un acordeón en una actuación callejera y una acuarela en la que se ve a otro niño entre unas alambradas completaría esta sala que enlaza con la primera obra que nos encontramos en el siguiente espacio en la que los protagonistas siguen siendo niños pero en este caso aparecen jugando en la playa con un fondo abstracto para que cada uno se lo imagine ayudado por los recortes en los que se puede leer palabras como diversión, cumpleaños, abuelo y abuela,… Con siete exposiciones en su haber, entre individuales y colectivas, Jesús agradece al hospital la oportunidad de exponer en Granada, ciudad que siempre le ha fascinado, por lo que todos los años viene un par de veces con su familia.
«Exponer aquí es un honor», afirma ante el resto de obras de temas étnicos pintadas para una exposición en Tarifa, un pintor en París en un amanecer brumoso junto al Sena, seguido de alguna que otra acuarela, óleos y pastel también con un tema étnico, o el titulado ‘El malecón de Cuba’, realizado a partir de una fotografía nos dan una idea de por dónde van sus preferencias. Le siguen otras obras de tema marino realizados 9 años atrás, que justifica por su lugar de nacimiento, la Línea de la Concepción (Cádiz), y el hecho de haber trabajado durante 17 años en Algeciras. «Me gusta mostrar el mar con su espíritu salvaje de ahí sus títulos: ‘Estruendo’ o ‘Rompiente’, para los que he empleado la espátula en lugar del pincel». Completa la muestra con una serie de paisajes realizados con espátula, para darles texturas y relieve que llevan títulos como ‘Patio soleado’, ‘Casa de campo’, ‘Contraluz’ o ‘El paseo’.
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