En estos momentos, Educación ha puesto en marcha 17 Escuelas de Voz, unas actuaciones formativas y preventivas de las patologías de voz, destinadas al profesorado granadino de todos los niveles educativos. 325 profesores y profesoras se han beneficiado de esta iniciativa, puesta en marca, en el contexto del Plan Andaluz de Salud Laboral, en el curso 2006/2007. Gámez, ha destacado la mayor incidencia de las disfonías entre las mujeres, lo que explica que sean ellas quienes más recurren a este servicio: 228, frente a 97 hombres.
Las Escuelas de Voz se desarrollan tanto en los centros de profesorado de la provincia como en los propios centros educativos. En ellas, se tratan, entre otros, los siguientes contenidos: medidas de higiene vocal y anatomía de la fonación, corrección postural y técnica respiratoria de la voz hablada, impostación vocal, control de la intensidad, voz conversacional o técnicas de relajación.
Junto a las Escuelas de Voz, se realizan también actuaciones de atención al personal docente afectado por problemas de disfonías funcionales y otras patologías afines. 13 profesores y 53 profesoras se han beneficiado de esta actividad desde que empezó a funcionar. Y, en este curso, ya hay 41 solicitudes para participar en la misma. Ambas actuaciones son realizadas por logopedas y su objetivo es concienciar al profesorado de la correcta utilización y cuidado de la voz.
Ana Gámez ha mostrado el material de megafonía inalámbrica que la Delegación de Educación pone al servicio del profesorado afectado. Son 70 equipos de megafonía para préstamo temporal. La demanda de este recurso se sitúa en torno al 50% de la cantidad disponible y el perfil de los profesionales que más lo solicitan es mujer y profesora de Secundaria.
Gámez señaló que los nódulos de las cuerdas vocales a causa de los esfuerzos sostenidos de la voz por motivos profesionales ya están reconocidos como enfermedad profesional para el profesorado y recordó, en este sentido, que la voz es el principal instrumento de trabajo del profesorado. Por ello, «queremos que adquieran hábitos saludables que supongan calidad de vida y eviten los trastornos de la voz. En definitiva, que el profesorado avance en sus derechos laborales».
El I Plan Andaluz de Salud Laboral y Prevención de Riesgos Laborales del personal docente de los centros públicos dependientes de la Consejería de Educación se aprobó por acuerdo del Consejo de Gobierno de septiembre de 2006. Es un instrumento destinado a planificar la actividad preventiva en los centros educativos y comparte con otros programas e iniciativas de la Junta de Andalucía el objetivo de implantar una cultura de la prevención en la sociedad andaluza. Junto a las medidas destinadas al profesorado, el Plan incluye programas, en colaboración con otras instancias de la Administración.