Una de las principales causas de muertes anuales en España se debe directa o indirectamente al tabaco. Nosotros, como docentes, no debemos de permanecer al margen de este asunto y coger el toro por los cuernos.
Bien sabido es que el tabaco es un negocio que mueve miles de millones de euros, que da trabajo y sustento a muchísimas familias, del que incluso se obtienen beneficios económicos procedentes de numerosas partes, no me compete hacer ideología política ni hablar del Gobierno, tan solo centrarme en el primer dato con el que he abierto este artículo: El tabaco mata y como quiero lo mejor para mis alumnos, sin descuidar el plano socioemocional y la integridad como persona de mi alumnado, mi deber como maestro es formar, informar, curtir, advertir sobre la presencia de esta lacra que nos acompaña desde el descubrimiento de América en 1492, aunque ya se llevaba ejerciendo esta desafortunada práctica 2000 años atrás en tierras americanas.
Quiero dejar muy clara mi postura hacia el tabaco y las personas que fuman a mi alrededor, que sin yo quererlo, me convierten inevitablemente en fumador pasivo, y no contentos con eso, me privan de respirar un aire relativamente puro y limpio que me pertenece, y muy especialmente, a mis pulmones.
Siempre he abogado por la libertad de todo ser humano de hacer con su vida y su cuerpo lo que desee, pero la controversia se genera cuando me afecta a mí directamente, ahí es cuando he de actuar, por mi salud física y mental.

¿CÓMO INTRODUCIR EL TEMA DEL TABACO?
En primer lugar, se introduce el tema a tratar al grupo en clase haciendo uso de preguntas claves tales como:
¿Qué es el tabaco?
¿Alguien fuma de tu familia?
¿Cómo pensáis que se empieza a fumar? ¿A qué edad?
Si es tan malo y mata, ¿Por qué creéis que no lo prohíben?
¿Hay alternativas para sustituir el tabaco? ¿Los vapers o cigarrillos electrónicos son mejores para la salud?
¿Creéis que es fácil dejarlo?
¿Por qué a la gente le cuesta dejarlo y pone infinidad de excusas?

DESARROLLO DEL TEMA DEL TABACO
Una vez que se ha llevado a cabo el llamado brainstorming (lluvia de ideas) por parte del alumnado, el maestro procede a dar una información privilegiada de la que solo él dispone; son datos objetivos, estadísticas, noticias, anécdotas, personas que han perdido la vida a causa del tabaco, testimonios de un miembro del personal que trabaja en Oncología (Mi madre, sin ir más lejos, trabajó allí unos años).
Es complicado el hecho de ser imparcial u objetivo abordando este tema, porque la ira, la impotencia, la desesperanza siempre van a repercutir a la hora de la presentación de un tema tan a la orden del día y de muy difícil solución o consenso.
¿LOS ESTAMOS ADOCTRINANDO?
Posiblemente el argumento y gestión de la clase de un fumador difiera en gran medida al de una persona no fumadora o inclusive autodenominada: antitabaco, como he de reconocer que es mi caso.
El maestro fumador que influya o adoctrine a sus alumnos para que tomen conciencia de lo perjudicial que puede llegar a ser el tabaco, posiblemente va a desear que termine la clase para fumarse un “piti” pese a la incongruencia de decirles a sus alumnos que no deberían de hacerlo, pero no predican con el ejemplo, no pueden, no quieren o no saben dominar su adicción sin límites.
Otros, en cambio, se abstienen de tratar este tema abiertamente por originar un conflicto entre lo que pueden decir y hacer, a lo que preferirán evitar esta controversia, y a otra cosa, mariposa.

En cambio, el no fumador expondrá con convencimiento sus argumentos, apoyados en una teoría científica, pues no le cabrá la duda de que está haciendo lo correcto para su alumnado. Dependiendo de las edades de nuestro alumnado se profundizará en mayor y en menor medida, sin embargo; si nos encontramos en tercer ciclo, muy especialmente en sexto de Primaria, estaremos tratando con pre-adolescentes que están a las puertas del Instituto, donde a buen seguro conocerán a niños ya fumadores o que se inician y puede a que a la par de ellos. ¡Quién sabe si con una charla estamos construyendo una conciencia de autoprotección!
Por tanto, nuestra conciencia puede quedar tranquila y limpia al estar haciendo lo correcto.
¿Cuándo se suelen iniciar en el consumo de tabaco? Debido a reuniones sociales, por no querer ser menos en un grupo reducido y que no te tilden del rarito o el corta-rollos, por dejarte alentar producto de un colegueo o por curiosidad, algunos terminarán probándolo y como toda droga adictiva, le restarán importancia, dirán que solo fuman dos o tres al día (1200 al año) o directamente se convertirán en adictos a algo de lo que con un previo trabajo se podía haber evitado.
MAÑANA LO DEJO… O PASADO.
Otros, en cambio continuarán fumando, mientras se intentan auto-convencer y convencer a los demás:
Si cuando más fumo es en reuniones de amigos y familiares. Si es el único vicio que tengo y tampoco fumo tanto. Es que me relaja. Es que me gusta y me apetece. Es que lo necesito después del café. Es que sin él no puedo hacer mis necesidades. Antes fumaba el doble y ahora la mitad. Ya ves tú, el vecino salía a correr, no fumaba ni bebía y le dio un vuelco al corazón y se murió. Al final, qué más da es el destino el que manda. Conozco a un tío mío que murió con 95 años y fumaba hasta del negro. El tabaco que yo fumo es de liar, por lo que tiene menos porquería que el de fábrica. Lo he intentado dejar muchas veces pero, quillo, me cuesta mucho. Ya, si eso, hablaré con el médico a ver si me manda unas pastillas para dejarlo. Una vez estuve cinco meses sin fumar, pero me ofrecieron unos del trabajo y volví a caer. ¿Te digo yo lo que tienes que hacer? Ya lo dejaré cuando quiera y esté preparado. El día menos pensado lo dejo, ya lo verás. Cuando nazca mi nieta ya lo habré dejado, te lo prometo… Nada, que no hay manera, que no puedo dejarlo y mira que lo he intentado.
Supongo que se habrán sentido identificados con más de un comentario de los expuestos, basado en hechos reales. Ni que decir tiene que, aunque es más que revisable la adicción que genera en el individuo el tabaco, siempre buscamos la forma de no salir de nuestra zona de confort, y cuando la pareja fuma, está visto y demostrado que poco o nada queda por hacer.
Porque nos solemos aferrar a cualquier argumento para caer y volver a caer, y si encima lo haces acompañado… tienes todas las de no ganar. Luego vienen los arrepentimientos y las lamentaciones. En ocasiones, cuando ya es tarde pues el cáncer llama a tu puerta, tienes los pulmones ennegrecidos o alguna enfermedad cardiovascular relacionada con su consumo. Ya es tarde, déjalo.
MENOS CONTENIDOS CURRICULARES Y MÁS VALORES
Volviendo al plano educativo, paradojas de la vida, algunos profesionales de la docencia prefieren centrarse, por citar un ejemplo esclarecedor, en la enseñanza del análisis morfosintáctico de unas oraciones subordinadas a enseñar valores, moral y ética, a la integridad como persona, a saber valorarse, cuidar su salud, su alimentación, sus relaciones sociales, su estado anímico… en definitiva a saber conservar un regalo irrepetible de los que no todos los aspirantes a seres vivos han podido disfrutar: la vida. No olvidemos que cada uno de nosotros somos el resultado milagroso de billones, trillones y cuatrillones de combinaciones posibles… Naciste tú… y vas y decides quitarte poco a poco la vida con el tabaco y otros vicios…


ACTIVIDADES PROPUESTAS SOBRE EL TABACO.
A continuación les voy a enumerar una serie de actividades que he desarrollado en mis clases, lo que no quiere decir que siempre ponga todos en práctica a la vez. Mi objetivo no es otro que el de compartir mis ideas, por si les puede servir ahora o en cualquier momento de su vida o como docente, por si les inspiro a llevar a cabo otras bien distintas y lo que sería la repanocha, que si fuman, dejen de hacerlo… su salud y su bolsillo, ¡Por qué no decirlo!, se lo agradecerán. Yo tal vez nunca me entere, pero con esa esperancita vivo. Las actividades pueden ser llevadas a cabo tanto en el aula como fuera de ella, en un ambiente familiar, por ejemplo. Todo en función de cual sea nuestro objetivo con la confección de las mismas.
Algún que otro docente me ha dicho: “Eso de la educación son cosas de sus padres. Da igual lo que le enseñes aquí. Si sus padres no lo llevan a cabo o no lo ven como tú, no hay nada que hacer. Que les enseñen ellos, que por algo son sus padres. Nosotros somos maestros y podemos enseñar algo puntual pero al final el peso y la responsabilidad de cómo van a ser en el día de mañana recaerá sobre ellos, los padres”.
PARA LEER O DESCARGAR PDF TIRA EL CIGARRO CHAVAL
Una alumna consiguió que su madre dejara de fumar por no querer escucharla más recitar esta poesía. Basado en hechos reales. Un orgullo y objetivo cumplido por todas las partes implicadas.
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CONCLUSIONES
Las conclusiones han de ser aportadas por el alumnado, porque proliferarán como resultado de un proceso de aprendizaje y asimilación de conocimientos sobre la materia, en la mayor parte de los casos desconocidos hasta la fecha para ellos.
Con esto me despido. Espero no haber ocasionado ningún agravio en ninguno de los lectores o lectoras.
Y si fumas, sabiendo que el tabaco es veneno… ¡Tira el cigarro, chaval!
Para terminar, una semblanza a una alumna genial del CEIP Tierno Galván de la Zubia, Cristina Muñoz Salas, que creó un cartel publicitario donde rezaba el siguiente mensaje: “Un cartón, una mancha en el pulmón”.











Comentarios
5 respuestas a «Pedro M. Moral Soriano: «Tira el cigarro, chaval»»
¡Extraordinario!
Es muy interesante la concienciación desde la clase a favor del aire limpio. Y la potenciación de los espacios sin humo desde la escuela es fundamental para un futuro más sano.
Gracias por tu labor Pedro
Qué importante es introducir en la educación primaria y secundaria de forma sostenida y no puntual esta cuestión en los niños.
Sobre todo en la secundaria, momento crucial en el inicio en el tabaquismo en los adolescentes.
Es fundamental que analicen los motivos de comenzar este mal hábito. Que comprendan que nada es más importante que la salud a partir de ese momento fatídico del que luego es tremendamente difícil salir.
Enhorabuena con esta iniciativa.
Muy buen programa para trabajar y concienciar a los jóvenes . Enhorabuena
Hola Jesús, muchas gracias por tu comentario. Efectivamente esa concienciación ha de estar presente desde edades muy tempranas. El problema es cuando ni los propios niños tienen referentes ni en sus casas ni en el colegio… Ojalá les esperen un futuro libre de humos… eso para empezar. Un abrazo
Fenomenal el artículo.
Concienciar de los perjuicios y enfermedades que provoca el tabajo es fundamental.
Trabajar este tema en clase me parece fundamental.
Poner nuestro granito de arena en la mejora de la salud es primordial.
En definitiva, buen trabajo Pedro.