Bajo el lema “Universidades, Asociaciones e Inteligencia Artificial”, la Universidad de Córdoba acogió, del 17 al 20 de septiembre, el XXIII Congreso de CAUMAS (Jornadas Internacionales sobre Asociacionismo en los Programas Universitarios de Mayores). El evento, que reunió a representantes de asociaciones de toda España y del ámbito internacional, se consolidó como un foro de encuentro donde el aprendizaje, la innovación y la fuerza del asociacionismo de mayores universitarios mostraron su capacidad de impacto social.
La organización corrió a cargo de la Asociación de Alumnos del Centro Intergeneracional Francisco Santisteban, que desplegó un extraordinario trabajo de acogida y coordinación. El congreso combinó sesiones académicas, mesas redondas y espacios de convivencia que permitieron compartir experiencias, buenas prácticas y retos comunes en torno a los Programas Universitarios de Mayores.
En esta edición participaron tanto delegaciones de asociaciones pertenecientes a la Confederación Estatal de Asociaciones y Federaciones de Alumnos y Exalumnos de los Programas Universitarios de Mayores (CAUMAS), como representantes internacionales conectados telemáticamente desde Lituania (Vilnius Medardo Cobotas University of the Third Age) e Italia (Universidad de la Tercera Edad UNITRE de Alessandria y Universidad de la Tercera Edad de Lecce). Estas aportaciones internacionales subrayaron la dimensión europea del movimiento, enriqueciendo el diálogo y situando el asociacionismo senior en un contexto global.
Por parte de ALUMA, acudieron José Rodríguez Sánchez (presidente), Rafael Reche Silva (secretario), Juan Luis Sáez Camacho (vocal de nuevas tecnologías), Manuel Corrales Carretero (vocal de cultura) y José Francisco Heras Jiménez (vocal de relaciones con la Universidad), acompañados por un grupo de socios y socias comprometidos. Nuestra asociación presentó varias ponencias que reflejaron el dinamismo y la diversidad de intereses del colectivo:
- “ALUMA y las nuevas tecnologías” (Juan Luis Sáez), que destacó la importancia de la digitalización como herramienta de inclusión y participación.
- “El deporte en las Asociaciones Universitarias de Mayores” (Rafael Reche), que puso en valor la actividad física como motor de bienestar, cohesión y envejecimiento activo.
Además, la delegación de ALUMA participó activamente en la Conferencia de Presidentes y en diversas mesas redondas, aportando reflexiones sobre el papel estratégico de las asociaciones en la vida universitaria.
Durante los cuatro días de congreso se puso de manifiesto la pluralidad de realidades existentes en los campus universitarios: desde diferencias en la oferta académica hasta los distintos modelos de relación entre asociaciones y universidades. Sin embargo, lo que quedó claro es que el alumnado senior universitario es un motor de vitalidad, con una capacidad organizativa y una vocación de aprendizaje permanente que enriquecen tanto a las universidades como al entorno social en el que se insertan.
Más allá del intercambio académico, el congreso se convirtió en un espacio de amistad, reconocimiento mutuo y construcción colectiva. El entusiasmo de los participantes evidenció que el asociacionismo no solo fortalece la identidad de cada programa, sino que crea una red de colaboración intergeneracional e interuniversitaria con gran potencial de crecimiento.
Desde ALUMA, expresamos un agradecimiento sincero a Rafael Santos Priego, presidente, a Ignacio Roldán Nogueras, secretario de la Asociación de Alumnos del Centro Intergeneracional de la UCO, y a todos los voluntarios que con dedicación y calidez hicieron posible un encuentro tan fructífero.
El congreso fue clausurado por la presidenta de CAUMAS, Inmaculada Fornosa, quien anunció que la próxima edición, el XXIV Congreso, tendrá lugar en Zaragoza en septiembre de 2026. Una cita que volverá a ser punto de referencia para seguir construyendo, juntos, el futuro del asociacionismo universitario de mayores.
En definitiva, este encuentro en Córdoba ha demostrado que los Programas Universitarios de Mayores son mucho más que una oferta académica: son espacios de crecimiento personal, de participación activa en la sociedad y de refuerzo de los lazos humanos. Allí donde hay una asociación de alumnado senior, hay una comunidad abierta, resiliente y dispuesta a seguir aprendiendo y transformando.
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