Entre la conferencia de Ramón Barrera y exposición de experiencias relevantes ( 5 de infantil, 8 de primaria, 6 de Secundaria y 7 de FP), y el magnífico broche musical del Coro del IES Fernando de los Ríos, también hubo unos minutos institucionales en los que el inspector adscrito al CEP de Granada, Francisco Martín Cebrián, dirigiría unas palabras a los más de 70 docentes que asistieron a esta actividad organizada por los asesores Javier Martín López y Mirella Ávila, en la que intervinieron una treintena de ponentes, 33 para ser más exactos.
Tras las palabras de bienvenida del director del CEP, Paco Romera, en las que también agradecería a los asistencias su esfuerzo «por estar aquí hoy, por venir a disfrutar de estas experiencias de relevantes, por organizar vuestra vida familiar, por conciliar con todo vuestro trabajo», así como al conferenciante, Ramón Barrera «porque ha venido a hacernos disfrutar como siempre» y al coro del instituto fuenterino, daría la palabra al inspector adjunto, Paco Martín «porque viene a apoyar con su presencia lo que estamos haciendo relacionado con la formación y las buenas prácticas».
Por su parte, el inspector devolvería los agradecimientos al director del CEP por la invitación a la actividad. Igualmente felicitaría a todos y cada uno de los participantes en el encuentro y, por supuesto, a los asesores «por su esfuerzo y colaboración sin la que no hubiera sido posible». A continuación hablaría cómo es necesaria la formación si se quiere conseguir la calidad en la enseñanza. «Sin profesorado de calidad no hay enseñanza de calidad y esa calidad del profesorado requiere una buena formación inicial y continua».
Así mismo, destacaría como la mayor parte del profesorado, sobre todo el que viene de Secundaria han cursado sus pero no se les ha preparado como profesores por lo que carece generalmente de formación pedagógica y didáctica y que en la década de los 80 se certificada al realizar el CAP, del que el 85 % decía que no le había servido de nada y el resto para casi nada. Ello conllevaba que cuando se tenía que enfrentar a un aula lo que se hacía, en el mejor de los casos, era imitar a los profesores que les habían ilusionado durante en sus años de estudiantes. «A partir de ahí empezábamos a construir un modelo de profesor que con el tiempo hemos ido perfeccionando. Luego viene el máster, ya un poco más completo, pero tampoco da respuesta a las necesidades de formación del profesorado. Aquí es donde entra la formación continua. Hace unos años el modelo de formación que se se venía impartiendo solían ser el de cursos donde nos venía un experto que decía cosas muy interesantes pero que no venía del aula.
Por ello, llegado a este punto justificó la celebración de este tipo de actividades en la que maestros y profesores comparten valiosas experiencias que han llevado a cabo en sus centros con su alumnado. Y que en muchos casos, estas buenas prácticas con la necesarias adaptaciones pueden ser replicadas en otros centros y con otros temas. «Para terminar porque ya es tarde y tenemos una de las cosas más bonitas de la tarde, felicitarlos, darles las gracias, animarlos y que están ustedes en el buen camino. Para mí ha sido un placer poder estar con ustedes y haber podido asistir a la presentación de alguna de las buenas prácticas. ¡Enhorabuena!», concluiría.
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