El CPR Sánchez Velayos, de Ugíjar, un colegio de compensatoria que apuesta por la educación creativa e inclusiva

La semana pasada el CPR Sánchez Velayos abrió sus puertas y ventanas a la educación creativa e inclusiva con la inauguración del Centro Juvenil VE, que debe su nombre a las iniciales de VElayos, y dos verbos que indican movilización, acción, dinamismo, implicación y participación: el imperativo del verbo ir y el imperativo del verbo ver. Las tres sesiones tituladas ‘El hacha de guerra’, ¡Qué pedazo de feria! y ‘20.000 leguas’, desarrolladas una cada tercer jueves de marzo, abril y mayo, aglutinan actividades, con un espíritu renovador y ganas de movilizar la comunidad educativa de Ugíjar desde un enfoque creativo.

El Centro Juvenil VE ha sido propuesto desde el área de compensatoria de la Delegación de Granada, a la que está al frente Miguel Ángel Caballero Mariscal, para el alumnado de 2º y 3º ciclo y cuenta con la colaboración del CEP de Motril, y su asesor Juanjo Ayala Carbonero, el Ampa las Siete Torres, el Ayuntamiento de Ugíjar y profesorado voluntario del colegio.

La idea es ofrecer una serie de talleres a lo largo de tres tardes, en las que desde el trabajo de las emociones, sentimientos y entrenamiento de conductas asertivas se vaya trabajando la cohesión grupal, el sentido de pertenencia, la motivación intrínseca, la fortaleza personal y la toma de decisiones.

En este colegio de compensatoria se está intentando implantar un modelo de educación y una metodología:

Integradora, plural e inclusiva, donde se valoren y respeten las diferencias; en la que tengan cabida todo el alumnado sin distinción de sexo, etnia, ideología, religión, cultura, clase social o características personales. Un centro reconocido por la aceptación de todos, referente cultural en la vida de un pueblo aislado geográficamente, por la igualdad de oportunidades que ofrece y la adecuación de la docencia a cada uno.
Que favorezca la comunicación interpersonal.
Capaz de lograr un clima que potencie unas buenas relaciones personales y profesionales.
Generadora de ilusión de forma permanente.
Abierta a iniciativas que aporten creatividad, dinamismo e innovación.
Participativa y democrática, con la intervención activa de todos los sectores implicados en la tarea educativa.
Que desarrolle las capacidades investigativas, cognitivas, artísticas, sociales y afectivas.
Que combine arte, ciencia y humanidad con el mismo nivel de competencias.
De calidad, donde el alumnado desarrolle las capacidades que le permitan lograr su realización personal, incorporarse a la vida adulta de manera satisfactoria y ser capaz de desarrollar un aprendizaje permanente a lo largo de su vida. Hoy día no sólo es importante saber, sino saber hacer y ser.
Relacionada y comprometida con su entorno inmediato, participando y dando acceso a diferentes actividades sociales, deportivas y culturales.
Que aplique criterios ecológicos en su gestión, con un ambiente ordenado, limpio y agradable.
Que potencie la educación en valores, cultivando la tolerancia, la solidaridad, el apoyo, el compañerismo y el respeto por el entorno más cercano (las personas, el aula, el centro, el pueblo…)

La pasada semana con el desarrollo de la actividad “Hacha de guerra” y los distintos talleres de tatuajes, atrapasueños, disfraces y pulseras, el alumnado disfrutó de una manera de aprender distinta. A la sesión, además del profesorado voluntario y del asesor del CEP, acudió el responsable de Compensatoria de la Delegación, Miguel Ángel Caballero y un grupo de colaboradores, quienes ayudaron y disfrutaron de la actividad que cerró con una merendilla y un baile final bajo el estribillo: “Tu vida cambió, no eres como ayer…hoy todo es mejor, sabes escoger… Sánchez Velayos es”.