Tras asistir a uno de los últimos ensayos, la directora de Pinos Puente Teatro nos cuenta que se trata de un proyecto que lleva funcionando más de un año y que ya van por su tercer montaje. Al ‘Cuento de Navidad’ y ‘La casa de Bernarda Alba’ que consiguieron colgar el cartel de no hay billetes en los espacios donde las representaron, ahora esperan repetir éxito con ‘El tablao del Lacio’, una obra inspirada en la canción de Joan Manuel Serrat, ‘Romance de Currito, El Palmo’ de 1974. «El texto literario se me ocurrió casi antes de que muriera Franco cuando Serrat sacó al mercado esta canción. Me enamoró esta historia de amor maravillosa», comenta con una jovialidad envidiable antes de proseguir dándonos pistas del contenido: «es una persona riquísima por dentro que se ve aislada de la sociedad. También es una historia del amor solidario entre vecinos que se ayudan que en otras épocas difíciles se veía mucho y ahora esa ayuda tan de corazón se ha perdido un poco».
De igual forma nos cuenta que al ubicarse en la posguerra y en un tablao, inspirado en el local madrileño de Los Gabrieles, «desgraciadamente ya cerrado, donde convivían militares franquistas y rojos, muy permisivo, también muy vicioso, muy alegre y a la vez muy sórdido, intenté que reflejase la cotidianidad de los días de la posguerra».
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Prueba de ello es la alternancia de momentos tristes y cómicos como sucede en la escena en la que entra el maquis, que comenta los duros momentos que ha vivido y poco después el Lacio lo confunde con un fontanero, o las alegrías propias del ‘tablao’ y de la celebración de la Nochevieja de 1947, en el momento en que Currito mientras se le está partiendo el alma de dolor y es arrastrado por una konga. Todo ello representado por 37 pineros integrantes de la Asociación, menos el guitarrista, que igualmente han compartido la experiencia de su paso por el Aula Municipal de Pinos Puente.
Entre las curiosidades relacionadas con el mobiliario está que las mesas y sillas que aparecen sobre el escenario pertenecieron al desaparecido Café Suizo de Granada que han sido cedidas para este espectáculo por Manuel Cava. Ensayan de manera más intensa desde hace unos cuatro meses, casi todas las noches, incluido sábados y domingos que es cuando puede el guitarrista. Su directora, Chari Sánchez, lleva más de 30 años haciendo teatro. Empezó como profesional en Teatro del Sur con Marián Sánchez Pantoja, y en 1988 entró como directora del Aula de Teatro de Pinos Puente donde ha permanecido hasta su jubilación hace dos años, actividad que prosigue ahora con la asociación cultural. «Tenemos el apoyo de todo el pueblo. El lunes pasado en dos horas se vendieron 400 entradas», comenta ufana. Tras la representación de «la historia de desamor de Currito» en Pinos Puente ya tienen previsto llevarla al Teatro Medina Elvira, de Atarfe, el 21 de noviembre, a Peligros en diciembre y en enero a Armilla.
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