La esencia luminosa del paisaje. A propósito de la exposición ‘Tornasol’ de María Ruiz Benito en el Colegio Oficial de Gestores

Técnica e inteligente dominio del color se unen en la obra de María Ruiz Benito, artista plástica granadina, quien, pese a su juventud, muestra una hábil capacidad en transcribir la sutil emoción ante el paisaje en serena expresión cromática.

Sus piezas poseen frescor visual, etereidad contemplativa, elegancia sencilla en su conclusión, en la que prima un sosiego en la escena, tranquilo tiempo que discurre. La pintora juega con tonalidades claras, empapadas de azul y gris, mostrando la fría pureza de un espacio contemplado como si fuera desvelado por vez primera, mas el ocre, verde o la impronta dorada, significan su presencia, como testigos de la fuerza telúrica del solar, y la luminosidad que sustenta el entramado sensitivo traducido en colores, primando siempre la huella del azul, vestido de irisaciones grises y rosáceas. Todo este espectáculo, plasmado en su obra, produce como resultado una impresión refrescante a la mirada, invitando al espectador a sumergirse en el ambiente, campos cromáticos neblinosos, donde la sorpresa mágica aguarda. Es así como expresa el embrujo que la historia, mitos y leyendas, han ido dando carácter a la tierra granadina. Logra mostrar todos estos efectos gracias al uso acertado del tono preciso, del gesto incorporado oportunamente con el pincel, la imagen que salva la bruma para mostrar el origen de la escena.

***Cúpula. Acrílico incluido en la muestra ‘Tornasol’***

Diluye el dibujo la artista, venciendo el caos danzante de la atmósfera fantástica que rodea la ciudad, sus campos y monumentos. Aparece ésta salpicada de accidentes depositados por variedad de gamas, depresiones definidas por el albor, y salientes intensos de color. Genera así una contemplación vibrante, siempre sometida bajo el ritmo de una mirada suave.

María Ruiz Benito consigue conjugar toda esta complejidad, de ideas estéticas, en un trabajo de sencilla impresión, que atrapa al espectador y lo sume en la placidez del instante, extrayendo la esencia luminosa, en las tonalidades que marcan el ritmo que define toda la composición. Ofrece esta pintora una obra excelente.