El consejero ha destacado que estos resultados han sido los mejores de las cuatro ediciones realizadas y que han supuesto un crecimiento del 4,2 por ciento en el caso de las matemáticas y un avance del 3,9 por ciento en lingüística, respecto al curso anterior. En este sentido, Alonso ha subrayado que estos datos son consecuencia del esfuerzo del profesorado, que se ha implicado en la adopción de una metodología basada más en la adquisición de competencias y en la participación, cada vez mayor, de las familias en la educación de sus hijos e hijas. También ha reconocido el trabajo de los alumnos.
En total, 93.357 estudiantes de 2º de Primaria de centros públicos, concertados y privados han participado durante el pasado mes de mayo en la prueba que establece una escala del 1 al 6 para medir las competencias básicas de los estudiantes, siguiendo los mismos parámetros homologados en pruebas internacionales como PISA.
El titular de Educación ha señalado que en Andalucía se está evaluando para mejorar, no para seleccionar o para establecer rankings de rendimiento. Así, ha explicado que por eso esta prueba se hace en segundo de Primaria y no al final de la etapa como obliga la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). De este modo, “tendremos elementos y tiempo suficiente para corregir aquellos problemas que se detecten y, por tanto, se podrá prevenir el fracaso escolar”, ha asegurado. Asimismo, ha recordado que las familias han recibido un informe donde, con un lenguaje sencillo y comprensible, se les explica con detalle cuál es el grado de competencia de su hijo y su hija. Además, ha hecho hincapié en que este documento es “exclusivamente para su información, sin que con ello se pretenda hacer clasificación ni segregación alguna”.
Respecto a los resultados de la prueba Escala, el consejero ha resaltado la evolución del alumnado situado en el máximo nivel (el 6) donde se sitúa en el 51 por ciento en competencia matemática y en el 43,2 por ciento en lingüística, mientras que hace dos años, en el curso 2011/12, el valor máximo se situaba en el 37 por ciento y 29 por ciento, respectivamente. También ha valorado de forma “muy positiva” que haya descendido el volumen de alumnado en los niveles inferiores de la escala (el 1 y el 2). “En el mismo periodo se ha reducido a la mitad”, ha explicado.
En cuanto a la prueba de destrezas lectoras que se ha realizado a una muestra de de 32.579 escolares, los datos han avanzado que el alumnado andaluz de este nivel educativo cada vez lee con más fluidez y, además, comprende adecuadamente lo que lee. Así, los estudiantes leen de media 90 palabras por minuto, y con un nivel de exactitud lectora del 98,2 por ciento, mejor que en las ediciones anteriores. También se avanza en el procesamiento sintáctico, es decir la puntuación y entonación adecuadas. En cuanto a la comprensión lectora, más del 50 por ciento de la muestra ha contestado con total corrección a las diez preguntas que se le plantearon sobre el texto leído, siendo el número medio de aciertos de 9.
Para Alonso estos datos están demostrando que las medidas puestas en marcha por la Junta para avanzar tanto en competencias básicas como en la aplicación de los conocimientos están dando resultados. Como ejemplo de ellas, iniciativas como el plan de Familias Lectoras que han propiciado que 140.000 padres y madres adquieran el compromiso de leer con sus hijos.
La evaluación Escala permite comprobar los niveles alcanzados por el alumnado que finaliza el primer ciclo de Educación Primaria en la adquisición de las competencias en Comunicación lingüística en lengua española, abarcando la comprensión lectora y la expresión escrita, y en Razonamiento matemático. Para valorar dicho nivel se tienen en cuenta, además, factores de carácter sociocultural como el índice socioeconómico y cultural del alumnado y del centro.
Estudios de las familias
Por otro lado, Luciano Alonso ha presentado los resultados de dos estudios cualitativos realizados por la Agencia Andaluza de Evaluación Educativa que permiten conocer la evolución de las familias andaluzas y de la satisfacción que muestran con el sistema educativa andaluz.
Uno de los trabajos ha medido cómo las familias andaluzas están experimentando una profunda transformación que permite recortar las diferencias con otras comunidades autónomas. Según este estudio se ha constatado que están más y mejor formadas. De hecho, el porcentaje de progenitores de los escolares de Primaria y de la ESO sin titulación ha bajado un 5 por ciento en cinco años. Otro dato es que alrededor del 20 por ciento de los padres y madres del alumnado de enseñanzas obligatorias tiene titulación universitaria, aumentando en 5 puntos los padres y en 8 las madres.
El consejero ha explicado que el estudio también refleja que, cada vez más, la educación recibe «la atención que merece» en los hogares andaluces. Así, el 95 por ciento del alumnado de la comunidad andaluza ya cuenta con un lugar apropiado para el estudio. Sobre el acceso a internet, en el curso 2012/13 más del 82 por ciento del total de hogares del alumnado de Primaria lo tenía, mientras que en las casas de estudiantes de Secundaria se situaba cerca del 89 por ciento.
El otro estudio se ha centrado en valorar el grado de satisfacción de las familias andaluzas con su sistema educativo. Alonso ha señalado que la acción tutorial ha sido el factor mejor valorado con un 8,87 en una escala de 10. Otro de los datos que ha avanzado el consejero ha sido que ocho de cada diez de las familias encuestadas responden que recomendarían el centro en que sus hijos cursan estudios. También las familias valoran «muy positivamente» como enseña el profesorado con una calificación de 8,42.
