El siglo decimonónico
comenzó con turbulencias
dirimiéndose en España
la guerra de Independencia.
Contra el invasor francés,
la popular resistencia
salvaguardó palmo a palmo
el valor de nuestra tierra
afianzando unos principios
fervorosos en esencia:
patria, religión y rey,
fueron el santo y la seña.
Napoleón Bonaparte
fundó dinastía nueva
nombrando rey a su hermano,
de mote, “Pepe Botella”.
La victoria de Bailén
dio a los españoles fuerzas
creando una Junta Central
que fue clave en la contienda
y en la capital de Cádiz,
icono de resistencia,
nació una Constitución
apellidada “la Pepa”.
Era una ley liberal,
democrática y moderna
para que el pueblo español
en libertad conviviera.
El genial Goya pintó
con una expresiva fuerza
los horrores cometidos
en la sangrienta contienda
sufrida por la ambición
de la locura francesa.
Mientras tanto nuestro Imperio,
expandido por América,
se quebraba día a día
buscando su independencia.
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Profesor jubilado y escritor, autor de
‘Ortografía práctica del español’, ‘Ronda para niños’ (inglés),
‘Federico en su centenario’, ‘Las acacias del Macabe’,
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‘Mencía de Mendoza. La nieta del cardenal’
y ‘La historia de España en verso’
