Este centro comenzaba el pasado curso su año cero por lo que su coordinadora dedicó bastante tiempo a asistir a reuniones, jornadas y «empaparme de todo pues es algo muy novedoso». Este curso ha iniciado su andadura con uno de los grupos de 25 alumnos que recibe varias horas a la semana de Conocimiento del Medio y Educación Física en inglés. «Se les oferta a los padres y ellos lo solicitan. Luego si hay más alumnos de los que puede haber en el grupo se hace un sorteo. El primer año se quedaron fuera 4 ó 5. Los padres están muy motivados y en este colegio se ha notado el incremento de alumnado por tener aula matinal, comedor escolar y ser bilingüe», explica Eli Berbel. El curso 2008/09 contará con tres grupos bilingües pues se empezará con 1º, y se seguirá la experiencia en 3º y 4º.
Comunicación oral
Para poder impartir algunos temas de Conocimiento del Medio en inglés, han organizado un grupo de trabajo que cuenta con el seguimiento del CEP de Granada. «Hemos seleccionado los temas más importantes o que mejor se adapten y hemos elaborado nuestro propio material y otro complementario como tarjetas y juegos», señala Ana María Vilches. A continuación, explican que en total se propusieron adaptar ocho temas de los que ya llevan cinco: los sentidos, los músculos, los huesos y articulaciones, los animales, salud y deporte. Este material está pensado, en principio, para trabajar oralmente. «La escritura –añaden– la introduciremos el próximo curso o cuando lo consideremos oportuno pues todo está en función de la comprensión y expresión oral».
Por ello, consideran «ideal» para el buen funcionamiento del programa que el especialista del idioma sea el tutor o tutora, de esa forma los saludos, despedidas, normas de clase se pueden hacer en inglés incluso, como es el caso de su centro se impartan también algunos temas de Matemáticas, aunque no las tengan incluidas dentro del proyecto. En cuanto al proceso que siguen, indican que primero estudian la unidad en castellano y después en inglés, aunque en algún caso para experimentar lo han hecho al revés, lo que les ha permitido comprobar que no existe ningún problema pues en todo caso el estudiarlo en una y otra lengua les sirve para repasar.
Ambas reconocen que existe un abismo entre cómo aprendieron el idioma y cómo lo están enseñando y la riqueza que van a tener estos niños cuando acaben la Primaria, pues no sólo son las clases en inglés sino que además estos alumnos ya pudieron realizar una inmersión lingüística, comunicarse a través de correo postal y electrónico con el alumnado con el que el centro está hermanado y contar con las clases de dos ayudantes lingüísticas que también intervienen con el resto de los grupos del centro.