Durante varias semanas, el CEIP Federico García Lorca de Olivares podrá disfrutar de una exposición compuesta por 8 paneles informativos proporcionados por la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul. Estos paneles ofrecen información esencial sobre los efectos negativos que los gases de efecto invernadero están causando en nuestro planeta.
La exposición, titulada «Emergencia Climática«, busca concienciar sobre la gravedad del problema y motivar a la acción para combatirlo. Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante el uso de energías limpias, la modificación de nuestro estilo de vida y hábitos de consumo es fundamental. ¡Podemos detenerlo si actuamos ahora! ¡Aún estamos a tiempo!
Los roll-ups informan sobre cómo prepararnos para el presente, adaptándonos al cambio climático y haciendo frente a los daños que se están produciedo en la sociedad, el medioambiente y la economía. Se subraya la importancia de reducir riesgos y aprovechar oportunidades beneficiosas. Para mitigar el cambio climático, es fundamental disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero y fomentar el uso de energías limpias y renovables.
Andalucía es una de las regiones europeas más vulnerables al cambio climático, enfrentando problemas como sequías, olas de calor, inundaciones, heladas, mayor riesgo de incendios forestales y una disminución de la masa forestal. También se observa una pérdida de la calidad y disponibilidad del agua, el aumento del nivel del mar que afectará a los acuíferos de agua dulce, el descenso de la producción agrícola por el estrés hídrico y un aumento en los casos de alergias.
En España, las emisiones de gases de efecto invernadero alcanzan cifras alarmantes, siendo el dióxido de carbono el gas que más se emite a la atmósfera, seguido por el metano, el óxido nitroso y los gases fluorados. Nuestro estilo de vida es responsable de estas emisiones, con el transporte como uno de los principales culpables, ya que en su mayoría depende de combustibles fósiles como la gasolina y el gasóleo. Por ello, resulta crucial avanzar hacia una movilidad más sostenible que permita mitigar estos impactos ambientales.
Sin embargo, la movilidad no es el único factor que afecta negativamente a nuestro planeta; nuestros hábitos de consumo desmedido también contribuyen al deterioro de la salud de la Tierra. Lo más grave en la sociedad del siglo XXI es la inacción frente a estos problemas, que nos aproxima cada vez más a un posible final para la humanidad.
Como habitantes de la Tierra, es fundamental que realicemos una profunda reflexión. Somos seres inteligentes que conocemos lo que nos beneficia y lo que nos perjudica. Sin embargo, ¿por qué seguimos eligiendo caminos equivocados? Nos refugiamos detrás de pantallas en lugar de trabajar la tierra, cultivar nuestros propios alimentos o criar animales para el autoconsumo, como hacían nuestros antepasados, y no hace tanto, nuestros abuelos. Si no cuidamos el sector primario, las consecuencias serán irreversibles, no solo para el planeta, que ya sufre, sino también para nuestra salud, que se está viendo afectada. Lo más preocupante es el legado desolador que estamos dejando a nuestros hijos.
Solo cuando nos demos cuenta de que estamos en caída libre querremos volver a lo tradicional, al autoconsumo. Lo que estamos viviendo es vergonzoso: consumimos sin control ni verdadera necesidad. Nuestro planeta nos necesita, al igual que las generaciones futuras. La tecnología y los avances no nos proporcionarán alimento ni agua. Estamos atrofiando nuestras mentes y alejándonos de lo realmente importante: ser felices haciendo lo que se ha hecho durante toda la historia, cuidar la tierra, los animales y vivir con lo necesario.
A pesar de que hoy en día parece que lo tenemos todo, no somos felices. Este malestar social es global. Los avances tecnológicos nos están cegando y apartando de lo fundamental: cuidar nuestro planeta y todo lo que alberga.
Invitamos a los vecinos de Olivares y a cualquier persona interesada a visitar nuestro colegio, leer los paneles informativos y ofrecer una valoración crítica sobre lo que estamos haciendo y lo que se debería mejorar.
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