El artista Alonso Cano
fue arquitecto y escultor
además de un exquisito
y delicado pintor,
que, aunque vivió en el Barroco,
en él perdura el fervor
del clasicismo humanista,
ejerciendo con pasión
las extraordinarias dotes
de un maestro en la creación.
Discípulo de Pacheco
en la ciudad de Sevilla,
marchó después a Madrid
para ejercer su pericia
pues el duque de Olivares
era quien lo requería,
entrando así en contacto
con la Corte de la Villa.
Tuvo amistad con Velázquez
y en Madrid dejó constancia
de su calidad artística
en las pinturas y tallas,
siendo con Felipe IV
pintor de la Real Cámara.
Alonso Cano sufrió
una historia complicada
al implicarlo en la muerte
de su esposa, asesinada
en el lecho conyugal
con múltiples puñaladas;
rumores de todo tipo
y conjeturas extrañas
lo llevaron a la cárcel
en una experiencia infausta,
aunque al final quedó absuelto
retornando a su Granada
y vivió en el Albaicín,
barrio frontero a la Alhambra
embriagado por la luz
que brota en Sierra Nevada.
Ordenóse sacerdote
tras una vida agitada
y alcanzó la canonjía
en la seo de Granada,
donde su labor artística
dejó un sello de vanguardia
que ha transcendido en el tiempo
con notoriedad preclara.
Una de las grandes joyas
es la linda Inmaculada,
diminuta en estatura
pero de hermosa prestancia,
esculpida en la madera
de cedro, policromada,
frente a frente al facistol
y erigida en la peana,
envuelta en airoso manto
de geométrica elegancia,
situada en la sacristía
del gran templo de Granada.
La catedral luce cuadros
de la Virgen, donde narra
el insigne Alonso Cano,
con maestría consumada,
las escenas inmortales
de María Inmaculada
constituidas en dogmas
por la religión cristiana.
El artista proyectó
la monumental fachada
del templo catedralicio
por Siloé iniciada,
que, en el siglo XVIII,
fue exquisitamente ornada
por Risueño y otros discípulos
de la Escuela de Granada.
Alonso Cano murió
en la ciudad de Granada,
maltratado por la vida
y en una pobreza ingrata,
como otros tantos artistas
que, aunque alcanzaron la fama,
al ocaso de sus días
los persigue la desgracia.
Próximo romance: Elena/o de Céspedes
Anteriores entregas:
II. Ángel Ganivet García (Granada, 1865 – Riga, 1899)
III. Ibn Zamrak (Granada, 1333 – 1394)
IV. Isabel de Solís, Soraya (Martos, Jaén, – ¿Sevilla? S. XV, 2ª mitad)
V. Mira de Amescua (Guadix, 1577 – 1644)
VI. Francisco Alonso (Granada, 1887 – Madrid, 1948)
VII. Juan Latino (Cabra o Etiopía, 1518 – Granada, 1597)
VIII. Chorrojumo (Ítrabo, 1824 – Granada, 1906)
IX. San Juan de Dios (Montemor: Portugal, 1495 – Granada, 1550)
X. Boabdil (Granada, 1460 – Fez, 1533)
XI. Doña Juana I de Castilla (Toledo, 1479 – Tordesillas, 1555)
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